IV SEMAN DE PASCUA – 9 – 14/5/2022 – IV SETMANA DE PASQUA
|
LUNES Misa: Hch 11, 1-18; Sal 41, 2-3; 42, 3. 4; Jn 10, 1-10 Con la visión de Pedro en Gaza la Iglesia naciente se convence de que el Evangelio está destinado también a los gentiles, a quienes el Señor llama a la vida. El Señor lo confirma con la efusión del Espíritu Santo en la casa de Cesarea. En el E vangelio escuchamos el inicio del discurso del buen Pastor. El Señor mismo se autodefine: “Yo soy la puerta“. Se puede añadir: una puerta “siempre abierta“, como su corazón traspasado. Una puerta que da a la inmensidad de la vida eterna, saboreada ya en este mundo por la fe y los sacramentos. También por el amor fraterno. MARTES SAN JUAN DE ÁVILA, presbítero y doctor de la Iglesia San Juan de Ávila no hizo testamento porque afirmó que no tenía nada que dejar, puesto que su pobreza era suma. Sin embargo, legó el testimonio de la santidad de su vida, su predicación ardiente y sus obras escritas, entre ellas, la más famosa el “Audi filia“. Había nacido en Almodóvar del Campo en 1499, tras su paso por Salamanca y Alcalá fue ordenado presbítero en 1526 y murió en Montilla (Córdoba) tal día como hoy del año 1569. Fue una de las personalidades eclesiásticas más in fluyentes del Siglo de Oro español. Cuando quería embarcarse para la misión de la nueva España, el arzobispo de Granada, Pedro Guerrero, le instó: “Aquí en España, también hay muchos a quienes misionar y evangelizar. ¡Quédese predicando entre nosotros!“. Fue acusado por la Inquisición de erasmista y sufrió cárcel. Se dedicó a evangelizar principalmente Andalucía, donde un gran número de sacerdotes le seguían, ayudándole en la administración de los sacramentos y en la catequesis. Los temas preferidos de su predicación eran el Espíritu Santo, la Eucaristía y la Virgen María. Preparaba su oratoria con largos ratos de oración, a veces noches enteras en vela. Consiguió, por su predicación y santidad de vida, innumerables frutos de conversión y contribuyó a la renovación de la vida cristiana y a la reforma del clero. Tuvo relación de amistad con san Ignacio, san Francisco de Borja, san Pedro de Alcántara, san Juan de Ribera y san Juan de Dios, de quien fue maestro espiritual. También con Fray Luís de León y santa Teresa de Jesús, que lloró su muerte. Fue él quien confirmó la ortodoxia de la doctrina que la exímia mística escribió en su “Libro de la Vida“. Es patrono del clero diocesano español y su fiesta llena de alegría y renueva el ardor apostólico de los presbíteros de nuestras diócesis. Se le atribuye con mucho fundamento la autoría del “Soneto a Cristo Crucificado“. Canonizado por san Pablo VI en 1970, el Papa Benedicto XVI lo proclamó doctor de la Iglesia universal en 2012. El Papa Francisco, el 25 de enero de 2021, decretó inscribirlo en el “Calendario Romano General” con el grado de memoria “ad libitum“. Misa: Hch 11, 19-26; Sal 86, 1b-3. 4-5. 6-7; Jn 10, 22-30 El Evangelio, según el relato de los Hechos, llega a Antioquía, la gran ciudad, donde es predicado “a los griegos“, los paganos de cultura y religión helenística. Bernabé es enviado desde Jerusalén y se alegra de la gracia del Señor, que actuaba también en los paganos. A su vez, él va a buscar a Saulo y ambos misionan la Iglesia de Antioquía, “donde los creyentes son llamados por vez primera con el nombre de cristianos“. Según algún exegeta, esta denominación, “cristianos“, era un nombre despreciativo por parte de los judeocristianos. Espiritual y teológicamente, significa que formamos parte de su Nombre, del nombre del Señor, ya que somos de Él, somos suyos. En el gran Salmo de Sión, Salmo 86, la Iglesia es la nueva Sión, la Esposa, llamada a ser madre de los pueblos y donde brotan las fuentes del Bautismo que hacen a los hombres y mujeres hijos e hijas de Dios: “Todas mis fuentes están en ti“. En el Evangelio, se concluye el discurso de “Jesús, Buen Pastor“. Cuando los judíos le preguntan si Él es el Mesías, dice que sí, repite su condición de pastor que da la vida y añade una palabra altísima desde la cristología: “Yo y el Padre somos uno“. Nadie jamás en la historia ha pronunciado algo así. Esto pasó en Jerusalén, “el día de la Dedicación del templo“, en invierno. La palabra “pastor bueno“, “kalós” se puede traducir también como “pastor bello“. Desde la teología estética se puede entender esto como expresión de que Jesús enamora y seduce por su amor entregado. Así lo entendió San Juan de la Cruz en sus versos: “Un pastorcico solo está penado (…) del pecho del amor muy lastimado“. Texto de las obras de San Juan de Ávila: “Sacramento de amor y unión, porque por amor es dado, amor representa y amor obra en nuestras entrañas… Todo este negocio es amor“. (Sermón 51, 759) MIÉRCOLES Misa: Hch 12, 24–13, 5a; Sal 66, 2-3. 5. 6 y 8; Jn 12, 44-50 Se omite la noticia de la persecución de Herodes y la muerte de Santiago, también cómo Pedro es liberado por un ángel y la luz ilumina las tinieblas de su cárcel. El pasaje que escuchamos es el inicio de “los hechos de Pablo” y el principio del primer viaje apostólico: Bernabé y Saulo son “apartados“, puestos aparte, por el Espíritu Santo, en medio de la comunidad de Antioquía, para la obra que el mismo Espíritu les confiaba. La comunidad, por la oración, el ayuno y la imposición de las manos, casi disputa el envío misionero. La barca de los misioneros zarpa hasta Chipre y desde allí a Salamina. El viento del Espíritu les acompaña. Contemplando aquella embarcación donde iban Pablo y Bernabé, canta el Salmo: “Oh Dios que te alaben los pueblos“. Los pueblos que serán evangelizados y que conocerán la salvación. En el Evangelio, Jesús insiste en el hecho de que creer en Él es creer en el Padre, y de que sus palabras no son suyas, pertenecen al Padre, ya que Él es su Palabra. Jesús vive su misión en una total obediencia al Padre. También asegura que Él ha venido al mundo como luz, y, así, el que cree en Él no queda en las tinieblas. Y dice más: “No he venido para juzgar el mundo, sino para salvar al mundo“. Sin embargo, su Palabra será juicio para el mundo. JUEVES Misa: Hch 13, 13-25; Sal 88, 2-3. 21-22. 25 y 27; Jn 13, 16-20 En la lectura de los Hechos, la primera expedición misionera dirigida ya por Pablo, a quien desde ahora se le nombrará por su nombre latino. Desde Pafos, donde habían embarcado, llegan por mar a Perge y desde allí van a Antioquía de Pisidia. Bernabé acompaña al Apóstol, pues Juan Marcos los ha dejado. Predican en la sinagoga y para poder hablar de Jesús tienen que repasar toda la historia de Israel. En el Evangelio, Jesús, habiendo lavado los pies a los apóstoles, declara sin ambages: “Dichosos vosotros si lo ponéis en práctica”. Ha de ser así porque “ el criado no puede ser más que su amo, ni el enviado más que el que envía VIERNES Misa: Hch 13, 26-33; Sal 2, 6-7. 8-9. 10-11 y 12a; Jn 14, 1-6 En la lectura de los de los Hechos se acaba de escuchar la predicación de Pablo en la sinagoga de Antioquía de Pisidia. Con esas o parecidas palabras los apóstoles predicaban la Resurrección de Jesús. Es realmente el anuncio del “kerigma pascual“, Muerte, Sepultura y Resurrección. Jesús es el cumplimiento y la plenitud del camino de Israel como pueblo de Dios: éste era su destino y su vocación. La predicación de Pablo culmina con la solemne citación del Salmo mesiánico por excelencia, el Salmo 2: “Tu eres mi hijo, yo te he engendrado hoy“. La asamblea, gozosa y admirada, canta el mismo Salmo utilizando este versículo como aclamación responsorial. En el Evangelio, la comunicación íntima de Jesús en la sobremesa de la Cena de Pascua. Escuchamos cómo Jesús se despide de los suyos, pero que pronto “volverá“, en la donación del Espíritu Santo para llevarnos a lo largo del camino de la existencia donde Él está, en el seno de Dios. Cuando Tomás lúcidamente le pegunta que si no saben a dónde va, tampoco pueden saber el camino, Jesús le responde: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida. Nadie va al Padre, sino por mí“. SÁBADO SAN MATÍAS, apóstol La Iglesia celebra la memoria de todos los apóstoles, no se olvida de ninguno. Sabe que son los fundamentos de la fe. Matías significa en hebreo “regalo de Dios“. Clemente de Alejandría, s. I-II, escribe que fue uno de los 72 discípulos que Jesús envió a la misión. Lo cierto es que, según el libro de los Hechos de los Apóstoles, Matías siguió al Señor desde el Bautismo hasta la Ascensión. Escogido a suerte por la comunidad apostólica para suplir a Judas que había traicionado al Señor, completó el número de los Doce para significar el nuevo Israel de Dios. Tanto la Misa como el Oficio están empapados del gozo de la Pascua. El gozo del Espíritu Santo: aquel que, el día de Pentecostés, Matías recibió junto con los otros apóstoles. Misa: Hch 1, 15-17. 20-26; Sal 112, 1-2. 3-4. 5-6. 7-8; Jn 15, 9-17 Como no puede ser otra manera, en la primera lectura la elección de Matías, según el relato del libro de los Hechos. Tenía que completarse el número de los Doce puesto que había de significarse el nuevo Israel, la Iglesia. De entre todos los que habían sido testigos de la vida del Señor desde el principio, el bautismo en el Jordán, eligieron a suerte a Matías y así a él le tocó la suerte más grande: ser apóstol del Señor. A pesar del método, el sorteo, su elección es fruto de la oración de la comunidad. Es el mismo Señor quien designó a Matías. Con razón se lee en el Evangelio: “No sois vosotros quienes me habéis elegido, soy yo quien os he elegido“. El Salmo 112 se aplica a los apóstoles y se canta: “El Señor lo sentó con los príncipes de su pueblo“. Los apóstoles, según Mt 19, 28, participarán en el juicio del Señor. El nombre de Matías aparece en la segunda lista de los santos en el Canon romano. (Calendario-Directorio del Año Litúrgico 2022, p.254ss) |
DILLUNS Missa: Fets 11, 1-18; Sal 41, 2-3; 42, 3. 4; Jo 10, 1-10 Amb la visió de Pere a Gaza, l’Església naixent es convenç que l’Evangeli està destinat també als gentils, a qui el Senyor crida a la vida. El Senyor ho confirma amb l’efusió de l’Esperit Sant a la casa de Cesarea. En l’Evangeli escoltem l’inici del discurs del Bon Pastor. El Senyor mateix s’autodefineix: “Jo sóc la porta“. Es pot afegir: una porta “sempre oberta“, com el seu cor traspassat. Una porta que dóna a la immensitat de la vida eterna, assaborida ja en aquest món per la fe i els sagraments. També per l’amor fratern. DIMARTS SANT JOAN D’ÀVILA, prevere i doctor de l’Església Sant Joan d’Àvila no va fer testament perquè afirmà que no tenia res a deixar, ja que la seva pobresa era suma. No obstant això, va llegar el testimoni de la santedat de la seva vida, la seva predicació ardent i les seves obres escrites, entre elles, la més famosa, “Audi filia“. Havia nascut a Almodóvar del Campo l’any 1499, després del seu pas per Salamanca i Alcalá va ser ordenat prevere el 1526 i va morir a Montilla (Còrdova) tal dia com avui de l’any 1569. Va ser una de les personalitats eclesiàstiques més influents del Segle d’Or espanyol. Quan volia embarcar-se per la missió de la nova Espanya, l’arquebisbe de Granada, Pedro Guerrero, va insistir-li: “Aquí també hi ha molts a qui missionar i evangelitzar. Quedi’s predicant entre nosaltres!“. Va ser acusat per la Inquisició d’erasmista i va patir presó. Es va dedicar a evangelitzar principalment Andalusia, on un gran nombre de sacerdots el seguien, ajudant en l’administració dels sagraments i en la catequesi. Els temes preferits de la seva predicació eren l’Esperit Sant, l’Eucaristia i la Mare de Déu. Preparava la seva oratòria amb llargues estones de pregària, de vegades nits senceres sense dormir. Va aconseguir, per la seva predicació i santedat de vida, innombrables fruits de conversió i va contribuir a la renovació de la vida cristiana i a la reforma del clergat. Gaudí de relació d’amistat amb sant Ignasi, sant Francesc de Borja, sant Pere de Alcántara, sant Joan de Ribera i sant Joan de Déu, de qui va ser mestre espiritual. També amb Fra Luís de León i santa Teresa de Jesús, que va plorar la seva mort. Fou ell qui confirmà l’ortodòxia de la doctrina que l’exímia mística va escriure en el seu ” Libro de la Vida“. És patró del clergat diocesà espanyol i la seva festa omple d’alegria i renova l’ardor apostòlic dels preveres de les nostres diòcesis. Se li atribueix amb molt fonament l’autoria del “Soneto a Cristo Crucificado“. Canonitzat per sant Pau VI el 1970, el Papa Benet XVI el va proclamar doctor de l’Església universal l’any 2012. El Papa Francesc, el 25 de gener de 2021, va decretar inscriure’l en el “Calendari Romà General” amb el grau de memòria “al libitum“. Missa: Fets 11, 19-26; Sal 86, 1-3. 4-5. 6-7; Jo 10, 22-30 L’Evangeli, segons el relat dels Fets, arriba a Antioquia, la gran ciutat, on és predicat als grecs, els pagans de cultura i religió hel·lenística. Bernabé és enviat des de Jerusalem i s’alegra de la gràcia del Senyor, que actuava també en els pagans. Al seu torn, ell va a buscar Saule i tots dos missionen l’Església d’Antioquia, on els creients són anomenats per primera vegada amb el nom de cristians. Segons algun exegeta, aquesta denominació, “cristians“, era un nom menyspreador per part dels judeocristians. Espiritual i teològicament, vol dir que formem part del seu Nom, del nom del Senyor, ja que som d’Ell, som seus. En el gran Salm de Sió, Salm 86, l’Església és la nova Sió, l’Esposa, cridada a ser mare dels pobles i on brollen les fonts del Baptisme que fa els homes i dones fills i filles de Déu: “De tu brollen totes les meves fonts!“ En l’Evangeli, es conclou el discurs de “Jesús, Bon Pastor“. Quan els jueus li pregunten si Ell és el Messies, diu que sí, repeteix la seva condició de pastor que dóna la vida i afegeix una paraula altíssima des de la cristologia: “Jo i el Pare som u“. Ningú mai en la història ha pronunciat una cosa així. Això va passar a Jerusalem, el dia de la Dedicació del temple, a l’hivern. La paraula “pastor bo” “kalós” es pot traduir també com “pastor bell“. Des de la teologia estètica es pot entendre això com a expressió que Jesús enamora i sedueix pel seu amor lliurat. Així ho va entendre Sant Joan de la Creu en els seus versos: “Un pastorcico solo está penado (…) del pecho del amor muy lastimado“. Text de les obres de Sant Joan d’Àvila “Sagrament d’amor i unió, perquè per amor és donat, amor representa i amor obra en les nostres entranyes… Tot aquest negoci és amor“. (Sermó 51, 759) DIMECRES Missa: Fets 12, 24—13, 5; Sal 66, 2-3. 5. 6 i 8; Jo 12, 44-50 S’omet la notícia de la persecució d’Herodes i la mort de Jaume, també com Pere és alliberat per un àngel i la llum il·lumina les tenebres de la seva presó. El passatge que escoltem és l’inici dels “fets de Pau” i el principi del primer viatge apostòlic: Bernabé i Saule són “consagrats“, lit: “apartats“, és a dir, “posats a part” per l’Esperit Sant, enmig de la comunitat d’Antioquia, per a l’obra que el mateix Esperit els confiava. La comunitat, per la pregària, el dejuni i la imposició de les mans, gairebé disputa l’enviament missioner. La barca dels missioners s’embarca fins a Xipre i des d’allí a Salamina. El vent de l’Esperit els acompanya. Contemplant aquella embarcació on anaven Pau i Bernabé, canta el Salm: “Que us lloïn les nacions, Déu nostre, que us lloïn tots els pobles alhora“. Els pobles que seran evangelitzats i que coneixeran la salvació. En l’Evangeli, Jesús insisteix en el fet que creure en Ell és creure en el Pare, i que les seves paraules no són seves, pertanyen al Pare, ja que ell és la seva Paraula. Jesús viu la seva missió en una total obediència al Pare. També assegura que Ell ha vingut al món com a llum i, així, qui creu en Ell no queda en les tenebres. I diu més: “La meva missió no és condemnar el món, sinó salvar-lo“. No obstant això, la seva Paraula serà judici per al món. DIJOUS Missa: Fets 13, 13-25; Sal 88, 2-3. 21-22. 25 i 27; Jo 13, 16-20 En la lectura dels Fets, la primera expedició missionera dirigida ja per Pau, a qui des d’ara se l’anomenarà pel seu nom llatí. Des de Pafos, on havien embarcat, arriben per mar a Perga i des d’allà van a Antioquia de Pisídia. Bernabé acompanya l’Apòstol, ja que Joan Marc els ha deixat. Prediquen a la sinagoga i per a poder parlar de Jesús han de repassar tota la història d’Israel. En l’Evangeli, Jesús, havent rentat els peus als apòstols, declara sense embuts: “Feliços vosaltres si ho practiqueu“. Ha de ser així perquè “no hi ha cap criat més important que el seu amo, ni cap enviat més important que el qui l’envia“. DIVENDRES Missa: Fets 13, 26-33; Sal 2, 6-7. 8-9. 10-11; Jo 14, 1-6 En la lectura dels Fets s’acaba d’escoltar la predicació de Pau a la sinagoga d’Antioquia de Pisídia. Amb aquestes o semblants paraules els apòstols predicaven la Resurrecció de Jesús. És realment l’anunci del “kerigma pasqual“, Mort, Sepultura i Resurrecció. Jesús és l’acompliment i la plenitud del camí d’Israel com a poble de Déu: aquest era el seu destí i la seva vocació. La predicació de Pau culmina amb la solemne citació del Salm messiànic per excel·lència, el Salm 2: “Ets el meu fill, avui t’he engendrat“. L’assemblea, joiosa i admirada, canta el mateix Salm utilitzant aquest versicle com aclamació responsorial. En l’Evangeli, gràcies a la comunicació íntima de Jesús a la sobretaula del Sopar de Pasqua, escoltem com Ell s’acomiada dels seus, però que aviat “tornarà” en la donació de l’Esperit Sant, per portar- nos tot al llarg del camí de l’existència on Ell s’està, al si de Déu. Quan Tomàs lúcidament li pregunta que si ni tant sols saben on va, tampoc no poden saber el camí que hi porta, Jesús li respon: “Jo sóc el camí, la veritat i la vida: ningú no arriba al Pare, si no hi va per mi“. DISSABTE SANT MATIES, apòstol L’Església celebra la memòria de tots els apòstols, no se n’oblida cap. Sap que són els fonaments de la fe. Maties significa en hebreu “regal de Déu“. Climent d’Alexandria, s. I-II, escriu que fou un dels setanta-dos deixebles que Jesús envià a la missió. El cert és, segons el llibre dels Fets dels Apòstols, que Maties seguí el Senyor des del Baptisme fins a l’Ascensió. Escollit a sort per la comunitat apostòlica per suplir Judes, que havia traït el Senyor, completà el nombre dels Dotze per a significar el nou Israel de Déu. Tant la Missa com l’Ofici estan amarats del goig de la Pasqua. El goig de l’Esperit Sant: aquell que, el dia de Pentecosta, Maties rebé juntament amb els altres apòstols. Missa: Fets 1, 15-17. 20-26; Sal 112, 1-2. 3-4. 5-6. 7-8; Jo 15, 9-17 Com no pot ser d’altra manera, a la primera lectura trobem l’elecció de Maties segons el relat del llibre dels Fets. Havia de completar el nombre dels Dotze ja que havia de significar el nou Israel, l’Església. D’entre tots els que havien estat testimonis de la vida del Senyor des del principi, el Baptisme al Jordà, van triar a sort Maties, i així li va escaure la sort més gran: ser apòstol del Senyor. Tot i el mètode, a sorts, la seva elecció és fruit de l’oració de la comunitat. És el mateix Senyor qui va designar Maties. Amb raó es llegeix en l’Evangeli: “No sou vosaltres, els qui m’heu escollit. Sóc jo qui us he escollit“. El Salm 112 s’aplica als apòstols i es canta: “El Senyor l’asseu entre els poderosos del seu poble“. Els apòstols, segons Mt 19,28, participaran en el judici del Senyor. El nom de Maties consta a la segona llista dels sants en el Cànon romà. (Calendari-Directori de l´Any Litúrgic 2022, p.250ss) |
