2019 – DOMINGO V DE PASCUA
Domingo del mandamiento nuevo.
El Evangelio de hoy anuncia ya la Ascensión del Señor.
Él ya estará poco tiempo entre los discípulos y les enseña cómo deberán comportarse cuando sea glorificado.
Deberán estimarse unos a otros como Él los ha amado, y esto es un nuevo mandato.
En el Antiguo Testamento todavía no se podía formular el manda- miento del amor que Cristo aún no había entregado su vida.
Lo decisivo y realmente importante es la formulación: “Como yo os he amado“.
Es un mandamiento válido para todos y la única señal por la que el mundo conocerá que ellos son discípulos suyos.
En el Apocalipsis la magnífica visión de la ciudad santa, que desciende del cielo a la tierra, como manifestación simbólica de Dios que está siempre con los hombres, como última consecuencia del “como yo os he amado“.
La visión de la ciudad santa, la Jerusalén del cielo, la Esposa, que baja, es el resultado salvífico último y pleno de la unión del Verbo con la humanidad.
Son las bodas del Cordero y de la Esposa, ya preparada, que cantamos en las Vísperas dominicales.
(Calendario-Directorio del Año Litúrgico 2019, Liturgia fovenda, p. 196).