2020 – Servicio litúrgico para el mes de enero (Dr. Ramón Clavería -Jaca-)
Miércoles 1 de enero:
SOLEMNIDAD DE SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS
Color blanco. Misa propia. Gloria. Aleluya. Lecturas propias (leccionario V). Prefacio I de Santa María Virgen “en la maternidad”. Plegaria Eucarística I ó III. Bendición solemne de Santa María Virgen o del primer día del año.
La gracia, la paz y el amor de Dios nuestro Padre, que se han manifestado en Cristo Jesús, nacido de Santa María Virgen para nuestra salvación, estén con vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Si hace ocho días, al celebrar la Navidad, celebrábamos que el Hijo de Dios se ha encarnado y se ha hecho nuestro hermano, hoy comenzamos el año recordamos que también contamos con una Madre, María, que nos guía y renueva en la vida. Con Ella celebramos este día de gozo y fraternidad; por Ella y con Ella vamos a abrir nuestro ser al Reino de Dios, especialmente para que llegue a nuestra tierra la paz.
Agradezcamos por tanto en silencio, al comenzar la celebración, el don de ser hijos de Dios y, ante Jesús, que salva a su pueblo, pidamos humildemente perdón por nuestros pecados.
* Tú que elegiste a María por Madre y la llenaste de gracia y Espíritu
* Tú que recibiste el Sí total de María para ser Madre tuya y Madre nuestra
* Tú que nos regalas a María para que busquemos y tengamos en Ella la paz.
Gloria cantado.
Colecta: Oh Dios, que por la maternidad virginal de santa María entregaste a los hombres los bienes de la salvación eterna, concédenos experimentar la intercesión de aquella por quien hemos merecido recibir al autor de la vida, tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo. Él, que vive y reina contigo.
Monición al Credo: En el comienzo de este año de gracia, confesamos nuestra fe en el Dios eterno, Padre, Hijo, y Espíritu Santo, que se ha manifestado en el tiempo con sus intervenciones salvadoras, y que es dueño y Señor de la historia.
Oración de los fieles: Al comenzar un nuevo año, levantemos nuestra voz suplicante al Señor, que con su mirada abarca los tiempos y el universo y, poniendo nuestros deseos de felicidad para todo el mundo bajo la poderosa intercesión de la Madre de su Hijo, imploremos la misericordia divina en favor de todos los hombres.
1. Por la Iglesia, que peregrina por este mundo en el transcurso de los siglos hasta el gran día de Jesucristo: para que realice fielmente su misión. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones al ministerio sacerdotal; para que el año que hoy comenzamos, traiga al mundo entero, y especialmente a nuestra diócesis, vocaciones al sacerdocio. Roguemos al Señor.
3. Por todas las naciones del mundo: para que superando la guerra y toda clase de violencia, pongan sus riquezas en común, al servicio de la gran familia humana, trabajando siempre por la paz. Roguemos al Señor.
4. Por los que comienzan el año nuevo marcados por la tristeza, la soledad, la enfermedad, la angustia; para que encuentren ayuda en Dios y en los que les rodean. Roguemos al Señor.
5. Por nosotros, por nuestras familias y por todo nuestro pueblo; para que el año que comienza sea para todos año de bienes y de gracia. Roguemos al Señor.
Tu trono, Dios nuestro, permanece para siempre, y tus años no se acaban; escucha, pues, las súplicas que te presentamos por la intercesión de Santa María, y bendice el año que hoy comenzamos; para que nuestro trabajo cotidiano nos dé el pan de cada día, y nuestras almas encuentren también el alimento necesario para avanzar en el camino del bien y en la contemplación fiel de tu palabra. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Hemos recibido con alegría los sacramentos del cielo; concédenos, Señor, que nos ayuden para la vida eterna a cuantos proclamamos a la Bienaventurada siempre Virgen María Madre de tu Hijo y Madre de la Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Bendición solemne:
* Dios, fuente y origen de toda bendición, os conceda su gracia, derrame sobre vosotros la abundancia de sus bendiciones y os proteja durante todo este año que hoy comenzamos.
* Él os mantenga íntegros en la fe, inconmovibles en la esperanza y, en medio de las dificultades, perseverantes hasta el fin en la caridad.
* Él os conceda un feliz y próspero año nuevo, escuche siempre vuestras súplicas y os lleve a la vida eterna.
* Y la bendición de Dios todopoderoso…
Jueves 2 de enero:
Santos Basilio y Gregorio Nacianceno, obispos y doctores.
MEMORIA OBLIGATORIA
Color blanco. Misa propia y lecturas del día 2 de enero.
Prefacio II de Navidad. Plegaria Eucarística II.
La paz y el amor de Dios nuestro Padre, que se han manifestado en Cristo, nacido para nuestra salvación, estén con vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Empezamos el año recordando en la celebración de la Eucaristía a dos grandes santos del Oriente cristiano, como son San Basilio Magno, obispo de Cesarea, y San Gregorio Nacianceno, obispo de Constantinopla, naturales los dos de Capadocia, en la actual Turquía en el siglo IV, época de grandes turbulencias y divisiones entre los cristianos, y grandes amigos entre sí desde la juventud.
De los dos conservamos diversos escritos teológicos de gran claridad y profundidad, que les hicieron merecedores del título de doctores de la Iglesia, además de diversas homilías y poesías, de gran sensibilidad ante los problemas eclesiales y sociales de aquellos tiempos.
Nosotros también estamos llamados, como los santos Gregorio y Basilio , a la santidad de vida; sin embargo, fallamos a menudo en nuestro camino hacia ella. Por eso, iniciamos la celebración de los sagrados misterios de la Eucaristía pidiendo perdón a Dios por nuestros pecados.
* Tú eres la Palabra de Dios hecho hombre.
* Tú eres la imagen de Dios invisible.
* Tú eres el Santo de Dios.
Colecta: Oh, Dios, que te has dignado instruir a tu Iglesia con el ejemplo y doctrina de los santos obispos Basilio Magno y Gregorio Nacianceno, haz que aprendamos humildemente tu verdad y la vivamos fielmente en la caridad. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Oremos ahora, hermanos, de todo corazón a Dios nuestro Padre, para que nadie quede al margen de del amor que Jesús ha venido a traernos, y toda persona, en todo lugar, pueda vivir con esperanza y confianza.
1. Por la Iglesia; para que dando a conocer a todos los pueblos la promesa de la vida eterna, sepa dar respuesta a todos los que preguntan por Cristo. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones sacerdotales al servicio de nuestra diócesis; para que siguiendo el ejemplo de los santos Basilio y Gregorio, haya quienes dediquen su corazón a la virtud y a vivir según la esperanza futura. Roguemos al Señor.
3. Por los que gobiernan las naciones; para que descubriendo los signos de la presencia de Dios en el mundo trabajen siempre con espíritu de servicio. Roguemos al Señor.
4. Por los que sufren cualquier tipo de pobreza o necesidad; para que encuentren la ayuda que necesitan, tanto de las instituciones como de las personas de su alrededor. Roguemos al Señor.
5. Por nosotros y por nuestras familias; para que vivamos todos unidos por el amor y demos testimonio de la venida de Cristo al mundo por medio de nuestras obras. Roguemos al Señor.
Señor y Dios nuestro, que enviaste a Juan Bautista a dar testimonio de tu Hijo, y nos envías a nosotros para anunciar a todo el mundo su Buena Noticia; escucha las oraciones que te hemos dirigido y concédenos permanecer unidos a Cristo, para que, cuando se manifieste, tengamos plena confianza y no quedemos avergonzados ante Ti. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Dios todopoderoso, que la mesa celestial robustezca y acreciente la fuerza de lo alto en quienes celebramos la festividad de los santos Basilio y Gregorio, para que guardemos íntegro el don de la fe y caminemos por la senda de la salvación que se nos ha revelado. Por Jesucristo, nuestro Señor.
El mismo día, en la diócesis de Jaca:
Conmemoración de la Venida de la Santísima Virgen a Zaragoza. MEMORIA OBLIGATORIA (en Zaragoza Fiesta)
Color blanco. Misa de Santa María, Templo del Señor (Misas de la Virgen María nº. ). Aleluya. Lecturas del día 2 de enero, y propias en Zaragoza.
Prefacio III de Navidad, propio en Zaragoza. Plegaria Eucarística II.
Prefacio I de Navidad. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hoy celebramos la memoria de la venida de la Virgen María en carne mortal a Zaragoza, fecha entrañable y en la fe y devoción del pueblo aragonés, que recuerda que, según una piadosa, antigua, y venerada tradición, tal día como hoy del año cuarenta, la Santísima Virgen María se manifestó en Zaragoza sobre una columna o pilar, signo visible de su presencia, al apóstol Santiago y sus discípulos, que, desanimados por la terquedad de los habitantes de Cesaraugusta para recibir la buena noticia del Evangelio, se encontraban orando a las orillas del Ebro, y les animó en el anuncio de la fe.
Pongámonos, pues, en presencia de Dios al comenzar la Eucaristía y, por la intercesión de Santa María, la Virgen, refugio de pecadores, pidámosle perdón por nuestras faltas y supliquémosle que nos llene del don de su Espíritu Santo, el mismo Espíritu que fecundó las entrañas virginales de Santa María.
Yo confieso…
Gloria (en Zaragoza)
Colecta: Oh Dios, que de modo inefable has edificado un templo santo para tu Hijo, con la presencia singular de santa María, la Virgen, concédenos adorarte en el Espíritu Santo y en la verdad, siguiendo fielmente la gracia del bautismo, para merecer convertirnos nosotros también en templos vivos de tu gloria. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Oremos ahora, hermanos, de todo corazón a Dios nuestro Padre, para que nadie quede al margen de del amor que Jesús ha venido a traernos, y toda persona, en todo lugar, pueda vivir con esperanza y confianza.
1. Por la Iglesia; para que dando a conocer a todos los pueblos la promesa de la vida eterna, sepa dar respuesta a todos los que preguntan por Cristo. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones sacerdotales al servicio de nuestra diócesis; para que haya quienes dediquen su corazón a la virtud y a vivir según la esperanza futura. Roguemos al Señor.
3. Por los que gobiernan las naciones; para que descubriendo los signos de la presencia de Dios en el mundo trabajen siempre con espíritu de servicio. Roguemos al Señor.
4. Por los que sufren cualquier tipo de pobreza o necesidad; para que encuentren la ayuda que necesitan, tanto de las instituciones como de las personas de su alrededor. Roguemos al Señor.
5. Por nosotros y por nuestras familias; para que vivamos todos unidos por el amor y demos testimonio de la venida de Cristo al mundo por medio de nuestras obras. Roguemos al Señor.
Señor y Dios nuestro, que enviaste a Juan Bautista a dar testimonio de tu Hijo, y nos envías a nosotros para anunciar a todo el mundo su Buena Noticia; escucha las oraciones que te hemos dirigido y concédenos permanecer unidos a Cristo, para que, cuando se manifieste, tengamos plena confianza y no quedemos avergonzados ante Ti. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Alimentados con esta Eucaristía, haz, Señor, que te sirvamos con una conducta libre de pecado y, siguiendo el ejemplo de la Virgen María, te veneremos presente en nuestros hermanos y proclamemos con ella tu grandeza, alabándote sinceramente. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Viernes 3 de enero:
FERIA DEL TIEMPO DE NAVIDAD
Color blanco. Misa de feria de navidad (viernes)
y lecturas del día 3 de enero.
Prefacio III de Navidad. Plegaria Eucarística II.
(En Zaragoza y en Jaca, se celebra la memoria obligatoria trasladada de los santos Basilio y Gregorio)
La paz y el amor de Dios nuestro Padre, que se han manifestado en Cristo, nacido para nuestra salvación, estén con vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, al comenzar la
Eucaristía, y celebrar en ella la revelación de amor de Dios en Jesucristo,
nacido para salvarnos, reconozcamos que estamos necesitados de la
misericordia de Dios para hacer realidad el mensaje de paz y de amor que
Cristo ha anunciado al mundo, y pidamos perdón a Dios por nuestros pecados.
* Tú que te has hecho nuestro hermano.
* Tú que conoces y comprendes nuestra debilidad.
* Tú que eres el Príncipe de la paz.
Colecta: Ilumina con bondad a tus fieles, Señor, y enciende siempre sus corazones con la luz de tu gloria, para que en todo momento reconozcan a su Salvador y se adhieran sinceramente a Él. Por nuestro Señor Jesucristo.
O bien, de la memoria del Santísimo Nombre de Jesús:
Colecta: Oh, Dios, que cimentaste en la encarnación de tu Verbo la salvación del género humano, concede a tu pueblo la misericordia que implora, para que todos sepan que no ha de ser invocado otro nombre que el de tu Unigénito. Él, que vive y reina contigo.
Oración de los fieles: Hermanos, oremos al Dios y Señor de cielos y tierra, que nos ha amado de tal manera que podemos llamarnos hijos suyos.
1. Para que la Iglesia muestre a Cristo, en nuestros días, como el Cordero de Dios que toma sobre sí el pecado del mundo. Roguemos al Señor.
2. Para que no falten en nuestra diócesis sacerdotes santos que anuncien a todos que Jesús es el verdadero Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Roguemos al Señor.
3. Para que la Navidad empuje a los gobernantes de todo el mundo a borrar la diferencia entre los países ricos y los países pobres. Roguemos al Señor.
4. Para que los que sufren a causa de las injusticias humanas sientan la presencia del Enmanuel y se vean liberados de su situación. Roguemos al Señor.
5. Para que, como Juan Bautista, todos nosotros seamos también precursores de Cristo para los demás. Roguemos al Señor.
Atiende, Padre, las oraciones de tu pueblo y acógelas en tu bondad, para que al recordar el misterio del nacimiento de tu Hijo, que se manifestó para quitar los pecados, se avive nuestra fe, y seamos capaces de pedirte lo que es agradable a tus ojos. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Oh, Dios, que llegas hasta nosotros al participar en tu sacramento, realiza en nuestros corazones el efecto de su poder, para que al recibirlo, nos haga dignos del don que nos haces. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien, de la memoria del Santísimo Nombre de Jesús:
Poscomunión: Señor, la Víctima recibida que hemos ofrecido a tu majestad en honor del Nombre de Cristo infunda en nosotros tu gracia abundante, para alegrarnos también porque nuestros nombres están escritos en el cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Sábado 4 de enero:
FERIA DEL TIEMPO DE NAVIDAD
Color blanco. Misa de feria de navidad (sábado)
y lecturas del día 3 de enero.
Prefacio I de Navidad. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, dispongámonos a celebrar la salvación que Cristo nos ha traído naciendo de María Inmaculada, y comencemos la Eucaristía pidiendo humildemente perdón a Dios por todos nuestros pecados.
* Palabra eterna del Padre, por la que todo ha venido a la existencia.
* Luz verdadera, que has venido al mundo y a quien el mundo no recibió.
* Hijo de Dios, que, hecho carne, has acampado entre nosotros.
Colecta: Dios todopoderoso y eterno, que has querido manifestarte con una luz nueva por medio de la venida de tu Unigénito, concédenos que, así como merecimos que él participara, por su nacimiento de la Virgen, de nuestra existencia corporal, nosotros merezcamos ser coherederos en su reino de gracia. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Como Simón y Andrés, reconocemos en Jesús al Mesías que la humanidad esperaba, y unidos a Él, presentamos confiadamente nuestras peticiones a Dios Padre.
1. Para que la Iglesia, como Juan Bautista, sepa indicar a Cristo a los hombres de nuestro tiempo. Roguemos al Señor.
2. Para que Dios conceda vocaciones sacerdotales y religiosas a nuestra diócesis, que ayuden a encontrar a Cristo a todos aquellos que le buscan. Roguemos al Señor.
3. Para que todos los que trabajan con sinceridad la paz puedan hallarla encontrando a Cristo. Roguemos al Señor
4. Para que los cristianos seamos reconocidos como hijos de Dios por las obras de justicia y de amor a los hermanos necesitados. Roguemos al Señor.
5. Para que todos y cada uno de nosotros seamos anunciadores y apóstoles de Cristo en la sociedad. Roguemos al Señor.
Oh Dios, que quisiste que los discípulos de Juan siguieran a Jesús, escucha las súplicas que te hemos dirigido y muéstranos tu bondad, tu misericordia y tu fidelidad, para que siguiendo a tu Hijo nos dejemos transformar por su amor y alcancemos por Él la gracia de la inmortalidad. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Que tu pueblo, Señor, dirigido por tu abundante ayuda, reciba los auxilios presentes y futuros de tu amor, para que, sostenido por el consuelo necesario de las cosas temporales, aspire con más confianza a los bienes eternos. Por Jesucristo nuestro Señor.
Domingo 5 de enero:
II DOMINGO DESPUÉS DE NAVIDAD
Color blanco. Misa y lecturas del domingo. Gloria. Aleluya. Credo. Prefacio III de Navidad. Plegaria Eucarística III para las Misas con Niños con embolismos propios del tiempo de Navidad. Bendición solemne de Navidad.
La paz y el amor de Dios nuestro Padre, que se han manifestado en Cristo, nacido para nuestra salvación, estén con vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: En medio del ambiente festivo de las navidades, hoy nos reunimos de nuevo para la celebración de la Eucaristía en el domingo, día del Señor. Hoy no celebramos ninguna fiesta concreta, pero queremos conmemorar también el nacimiento de Cristo, quien, con aquella su primera venida en carne mortal, dio comienzo este nuevo tiempo, que perdurará hasta que Él vuelva.
Comencemos, pues, la celebración de la Eucaristía en el día que recordamos la victoria de Cristo sobre el pecado y sobre la muerte, reconociendo con humildad todos nuestros pecados.
* Palabra de Dios que existes desde el principio de los tiempos.
* Palabra de Dios que has venido a nuestro mundo.
* Palabra de Dios que te has hecho carne y has acampado entre nosotros.
Gloria.
Colecta: Dios todopoderoso y eterno, esplendor de los que en ti creen, dígnate, propicio, llenar de tu gloria el mundo y que el resplandor de tu luz se manifieste a todos los pueblos. Por nuestro Señor Jesucristo.
Credo: Confesamos nuestra fe en el Dios eterno, Padre, Hijo, y Espíritu Santo, que se ha manifestado en el tiempo con sus intervenciones salvadoras, y que es dueño y Señor de la historia.
Oración de los fieles: Presentemos ahora nuestras súplicas confiadas a Dios Padre, que nos ha predestinado a ser hijos suyos en Jesucristo, Señor y Salvador nuestro.
1. Por la Iglesia; para que sepa comunicar al que es el Verbo en el que está la vida, en lenguaje asequible al hombre de nuestro tiempo. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones sacerdotales; para que nunca falten en nuestra diócesis los sacerdotes necesarios para atender nuestras parroquias y comunidades. Roguemos al Señor.
3. Por todos los que tienen en sus manos los destinos de los demás; para que la luz de la verdad guíe a nuestros gobernantes, y a todos los que tienen autoridad en el mundo. Roguemos al Señor.
4. Por todos los que han perdido la fe; para que la luz de Cristo se manifieste a los que no le conocen, y atraiga de nuevo a los que se han alejado de Él. Roguemos al Señor.
5. Por todos y cada uno de nosotros y de nuestros familiares y amigos; para que nosotros sepamos dar testimonio de la luz de Cristo de manera que la gente pueda llegar a creer en Él. roguemos al Señor.
Dios y Padre nuestro; Tú que te has dado a conocer al mundo por medio de Jesucristo, tu Hijo, el Verbo que estaba en el principio junto a Ti y que alumbra a todo hombre viniendo al mundo, para entrar en diálogo con nosotros; escucha nuestras peticiones, atiende a nuestras súplicas, y concédenos aquello que con confianza y humildad te pedimos. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Humildemente te pedimos, Señor y Dios nuestro, que la eficacia de este sacramento nos purifique de nuestros pecados y dé cumplimento a nuestros buenos deseos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Bendición solemne:
* Dios, bondad infinita, que disipó las tinieblas del mundo con la encarnación de su Hijo y con su nacimiento glorioso iluminó este día santo aleje de vosotros las tinieblas del pecado y alumbre vuestros corazones con la luz de la gracia.
* Quien encomendó al ángel anunciar a los pastores la gran alegría del nacimiento del Salvador os llene de gozo y os haga también a vosotros mensajeros del Evangelio.
* Quien por la encarnación de su Hijo reconcilió lo humano y lo divino os conceda la paz a vosotros, amados de Dios, y un día os admita entre los miembros de la Iglesia del cielo.
* Y la bendición de Dios todopoderoso…
Lunes 6 de enero:
SOLEMNIDAD DE LA EPIFANÍA DEL SEÑOR
Color blanco. Misa y lecturas propias de la solemnidad (leccionario I-A).
Gloria. Credo. Prefacio de la Epifanía. Canon romano con embolismos propios de Epifanía. Bendición solemne de Epifanía.
El Señor Jesús, que por medio de una estrella se ha revelado a todos los pueblos, esté con todos vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Como aquellos sabios de Oriente, también nosotros, guiados por la estrella luminosa de la fe, estamos aquí para postrarnos ante el Niño Jesús, y reconocer que Él es nuestro Señor, la Luz verdadera que ilumina a todo hombre.
Preparémonos, pues, para celebrar dignamente esta Eucaristía, agachando nuestras cabezas ante Jesús, nuestro Señor y Salvador, y pidámosle perdón por nuestros pecados.
* Tú que eres la Luz, que brilla en las tinieblas.
* Tú que te manifiestas a todos.
* Tú que nos guías con la luz de tu estrella.
Colecta: Te rogamos, Señor, que el esplendor de tu majestad ilumine nuestros corazones, para que podamos atravesar las tinieblas de este mundo y lleguemos a la patria de la claridad eterna. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Hermanos, sigamos la estrella que nos conduce a Belén y vayamos al encuentro de Cristo Jesús y, sabiendo que él es el Dios con nosotros, presentemos nuestras oraciones al Padre, que en este día santo ha manifestado su poder a las naciones, la salvación a los pueblos y a nosotros la luz radiante de su gloria.
1. Por la Iglesia, extendida de Oriente a Occidente; para que, arraigando en todas las culturas, sea portadora de la paz y de la esperanza de Dios, y signo de salvación para todos los hombres y pueblos del mundo. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones al ministerio sacerdotal; para que no le falten a nuestra diócesis los sacerdotes que necesita para que le manifieste el amor que Dios tiene a todas sus criaturas. Roguemos al Señor.
3. Por todos los que gobiernan; para que Dios alumbre sus corazones y les muestre el verdadero camino de progreso y de justicia; y brille sobre las naciones que todavía no han recibido la Buena Noticia de Cristo la estrella que conduce a la salvación. Roguemos al Señor.
4. Por los que sufren sin esperanza, los que buscan sin fe, los que aman a Dios sin saberlo; para que se les manifieste e ilumine sus vidas, puedan confesar a Cristo como Señor y se postren ante Él como verdadero Dios. Roguemos al Señor.
5. Por todos y cada uno de nosotros, adultos y niños, que estamos aquí adorando al Señor, como los Magos de Oriente; para que todos podamos vivir la alegría profunda por el gran regalo de la salvación que nos ha traído Jesucristo. Roguemos al Señor.
Escucha nuestras oraciones, Dios todopoderoso y eterno, levanta la vista en torno y mira a todos los que se han reunido para celebrar tu gloria y proclamar tus alabanzas, y haz que los que hemos conocido y adorado a tu Hijo, Rey y Señor de todos los pueblos, vivamos siempre como hijos de la luz y nos esforcemos para iluminar con la luz de Cristo a todos los pueblos y naciones, ya que también los gentiles son coherederos, miembros del mismo cuerpo y partícipes de la Promesa en Jesucristo, por el Evangelio. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Renovados por estos santos alimentos, suplicamos, Señor, tu misericordia, para que la estrella de tu salvación brille siempre en nuestro espíritu. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Bendición solemne:
* Dios que os llamó de las tinieblas a su luz admirable derrame abundantemente sus bendiciones sobre vosotros y afiance vuestros corazones en la fe, la esperanza y la caridad.
* Y él, a todos vosotros, fieles seguidores de Cristo, manifestado hoy al mundo como luz en la tiniebla, os haga testigos de la verdad ante los hermanos.
* Y así, cuando termine vuestra peregrinación por este mundo, lleguéis a encontraros con Cristo, luz de luz, a quien los Magos, guiados por la estrella, contemplaron con inmensa alegría.
* Y la bendición de Dios todopoderoso…
Martes 7 de enero:
FERIA DEL TIEMPO DE NAVIDAD
Color blanco. Misa de feria de navidad (martes)
y lecturas del día 7 de enero.
Prefacio I de Navidad. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, comencemos la celebración de la Eucaristía acogiendo la salvación que Cristo, a quien contemplamos en estos días en el misterio de su nacimiento humilde, nos ha traído, y pidámosle sinceramente perdón por nuestros pecados.
* Tú que has venido a cumplir la voluntad del Padre.
* Tú que, despojado de tu rango, pasaste por uno de tantos.
* Tú que te has hecho Niño para salvar al mundo.
Colecta: Oh, Dios, cuyo Unigénito se manifestó en la realidad de nuestra carne, haz que merezcamos ser transformarnos interiormente por aquel que hemos conocido semejante a nosotros en su humanidad. Por Jesucristo nuestro Señor.
Oración de los fieles: Llenos de la luz de Jesucristo, que ha venido al mundo para iluminar toda oscuridad, elevemos nuestras súplicas a Dios Padre, y oremos para que su salvación llegue hasta los confines de la tierra.
1. Para que la Iglesia pueda anunciar con total libertad el evangelio, y así guíe a todas las naciones hacia la luz de Cristo. Roguemos al Señor.
2. Para que no falten jóvenes que escuchen la voz de Jesucristo y le sigan con firmeza en el ministerio sacerdotal y en la vida religiosa. Roguemos al Señor.
3. Para que la luz de Jesucristo llegue a todos los que buscan sinceramente la verdad, y puedan adorarlo como el Dios verdadero. Roguemos al Señor.
4. Para que los enfermos, los pobres y los marginados sean ayudados con caridad fraterna y generosa por todos sus hermanos. Roguemos al Señor.
5. Para que todos nosotros, iluminados por la fe, acojamos la invitación de Cristo a la conversión. Roguemos al Señor.
Señor y Padre nuestro, que nos mandas que nos amemos unos a otros, escucha nuestras peticiones y haz que teniendo a tu Hijo como luz de nuestras vidas, demos testimonio, por el servicio a los más necesitados, del Evangelio del Reino que ha venido a proclamar. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Oh, Dios, que llegas hasta nosotros al participar en tu sacramento, realiza en nuestros corazones el efecto de su poder, para que al recibirlo, nos haga dignos del don que nos haces. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Miércoles 8 de enero:
FERIA DEL TIEMPO DE NAVIDAD
Color blanco. Misa de feria de navidad (miércoles)
y lecturas del día 8 de enero.
Prefacio II de Navidad. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, comencemos la celebración de la Eucaristía, acción de gracias a Dios, que se ha hecho hombre para salvarnos y, poniéndonos en su presencia, pidámosle perdón por nuestros pecados.
* Palabra eterna del Padre, por la que todo ha venido a la existencia.
* Luz verdadera, que has venido al mundo y a quien el mundo no recibió.
* Hijo de Dios, que, hecho carne, has acampado entre nosotros.
Colecta: Oh, Dios, que iluminas a todas las naciones, concede a tu pueblo gozar de una paz estable e infunde en nuestras almas aquella luz espléndida que derramaste en los corazones de nuestros padres. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Oremos, hermanos, confiadamente a Dios nuestro Padre, que nos ha amado hasta el punto de enviar a su Hijo como propiciación por nuestros pecados.
1. Por la Iglesia; para que manifieste a todos el rostro compasivo de Cristo y los tesoros de gracia que le han sido confiados. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones sacerdotales y religiosas; para que los jóvenes descubran la vocación a la que Cristo les llama. Roguemos al Señor.
3. Por todos los que tienen autoridad en el mundo; para que gobiernen con justicia y rectitud y hagan florecer en la tierra la paz y el bienestar. Roguemos al Señor.
4. Por todos los que sufren en el cuerpo o en el espíritu; para que sus necesidades sean cubiertas por nuestra caridad fraterna. Roguemos al Señor.
5. Por todos y cada uno de nosotros; para que nos hagamos sensibles a los problemas de los demás y el mundo nos conozca por el amor mutuo. Roguemos al Señor.
Dios y Padre nuestro, que has enviado al mundo a tu Hijo único para que vivamos por medio de Él, concédenos aquello que te hemos pedido, y danos tu gracia para que podamos ofrecerte a ti y a los hermanos todo el amor del que nos has hecho capaces y todos los hombres reciban en abundancia los bienes mesiánicos. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Que tu pueblo, Señor, dirigido por tu abundante ayuda, reciba los auxilios presentes y futuros de tu amor, para que, sostenido por el consuelo necesario de las cosas temporales, aspire con más confianza a los bienes eternos. Por Jesucristo nuestro Señor.
Jueves 9 de enero:
FERIA DEL TIEMPO DE NAVIDAD
Color blanco. Misa de feria de navidad (jueves)
y lecturas del día 9 de enero.
Prefacio III de Navidad. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, conscientes de la Encarnación del Hijo de Dios y su nacimiento no son una anécdota en la historia, sino un acontecimiento histórico que desborda la historia y el tiempo, y nos salvan hoy y aquí; acojamos ahora nosotros esa salvación que Cristo nos ha traído, y comencemos la celebración de la Eucaristía pidiendo perdón al Señor por nuestros pecados.
* Tú que has venido a cumplir la voluntad del Padre.
* Tú que, despojado de tu rango, pasaste por uno de tantos.
* Tú que te has hecho Niño para salvar al mundo.
Colecta: Oh Dios, que por medio de tu Hijo has hecho aparecer ante todas las naciones la luz de tu eternidad, concede a tu pueblo reconocer la plenitud espléndida de su Redentor para llegar con su ayuda a la claridad eterna. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Dirijamos ahora nuestras súplicas confiadas a Dios Padre, que ha enviado a su Hijo Jesucristo para ser salvador del mundo.
1. Para que la Iglesia, con maternal sabiduría, ayude a todos los cristianos a comprender profundamente las palabras y los hechos de Jesús. Roguemos al Señor.
2. Para que Dios suscite abundantes y santas vocaciones a la vida sacerdotal y religiosa, que sean especialmente sensibles a los problemas de los demás. Roguemos al Señor.
3. Para que el Evangelio de Cristo sea proclamado a todos los pueblos y la humanidad no tema abrir de par en par las puertas a Cristo, que trae la paz. Roguemos al Señor.
4. Para que los que son marginados en la sociedad se vean atendidos y socorridos en sus necesidades por nuestra caridad . Roguemos al Señor.
5. Para que todos nosotros sepamos reconocer en el mundo los muchos signos de la presencia del Enmanuel. Roguemos al Señor.
Señor y Dios nuestro, que permaneces en nosotros si nos amamos los unos a los otros, atiende las plegarias que te hemos dirigido y concédenos tu gracia, para que en todo momento y circunstancia confesemos que Jesús es tu Hijo y permanezcamos unidos a Ti. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Concédenos, Dios todopoderoso, que, por la eficacia de estos santos misterios, se fortalezca constantemente nuestra vida. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Viernes 10 de enero:
FERIA DEL TIEMPO DE NAVIDAD
Color blanco. Misa de feria de navidad (viernes)
y lecturas del día 10 de enero.
Prefacio I de Navidad. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial (a elegir): Hermanos, al comenzar la Eucaristía, y reconociendo que estamos necesitados de la misericordia de Dios para hacer realidad el mensaje de paz y de amor que Cristo ha anunciado al mundo con su nacimiento, pedimos perdón a Dios por nuestros pecados.
* Tú que has venido a cumplir la voluntad del Padre.
* Tú que, despojado de tu rango, pasaste por uno de tantos.
* Tú que te has hecho Niño para salvar al mundo.
Colecta: Dios todopoderoso, concédenos que el nacimiento del Salvador del mundo, anunciado por una estrella, se manifieste y crezca siempre en nuestros corazones. Por Jesucristo nuestro Señor.
Oración de los fieles: Elevemos ahora, hermanos, nuestras súplicas a Dios Padre, que en su Hijo Jesucristo nos ha mostrado el amor verdadero.
1. Para que la Iglesia sepa actualizar los signos de curación y liberación que Cristo hacía. Roguemos al Señor.
2. Para que no falten jóvenes que no tengan miedo en entregarse al ministerio sacerdotal y en la vida consagrada. Roguemos al Señor.
3. Para que todos los gobernantes sirvan al pueblo con justicia y rectitud. Roguemos al Señor.
4. Para que en el amor a los hermanos todos manifestemos el auténtico amor hacia Dios. Roguemos al Señor.
5. Para que todos nosotros permanezcamos unidos a Cristo y fieles al Espíritu que hemos recibido. Roguemos al Señor.
Señor y Dios nuestro, que en tu Hijo has dado pleno cumplimiento a las Escrituras, mira al pueblo que te suplica confiando en tu amor de Padre y concédele los dones que de ti espera, para que creyendo que Jesús es el Cristo, cumplamos tus mandamientos y amemos a todos nuestros hermanos. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Oh, Dios, que llegas hasta nosotros al participar en tu sacramento, realiza en nuestros corazones el efecto de su poder, para que al recibirlo, nos haga dignos del don que nos haces. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Sábado 11 de enero:
FERIA DEL TIEMPO DE NAVIDAD
Memoria votiva de la bienaventurada Virgen María
Misa del común de Santa María Virgen III. Lecturas del día 12 de enero.
Prefacio II de Navidad. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, nos disponemos ya a terminar el tiempo de Navidad, y lo vamos a hacer teniendo un recuerdo especial en la Eucaristía hacia Santa María, la Madre de Dios. Comencemos, pues, la celebración de los santos misterios y, poniéndonos en la presencia de Dios, pidámosle perdón por nuestros pecados.
* Tú que eres la Palabra de Dios hecho hombre.
* Tú que eres la imagen de Dios invisible.
* Tú que eres el Santo de Dios.
Colecta: Oh Dios, tú quisiste que naciera del seno de una Virgen el Verbo engendrado por ti desde la eternidad; concédenos, por intercesión de santa María, que ilumine nuestras tinieblas con el resplandor de su presencia y que, de su plenitud, recibamos la alegría y la paz. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Dirijamos ahora nuestras oraciones a Dios Padre, sabiendo que nos escucha siempre que le pedimos algo según su voluntad.
1. Para que la Iglesia se guarde siempre de toda injusticia, para vivir así en la verdad y anunciarla a los hombres del mundo entero. Roguemos al Señor.
2. Para que nunca falten sacerdotes que con su vida y ministerio, sean anunciadores y testigos de Cristo en el mundo. Roguemos al Señor.
3. Para que la búsqueda de la justicia, de la paz y de la verdad sea un distintivo que identifique a cuantos detentan autoridad en la sociedad. Roguemos al Señor.
4. Para que la misericordia y el testimonio de los cristianos lleguen y ayuden a convertirse a los pecadores y a cuantos se han alejado de Dios. Roguemos al Señor.
5. Para que, como Juan Bautista, sepamos renunciar al egoísmo, y estemos dispuestos a menguar para que Cristo crezca en estima y prestigio. Roguemos al Señor.
Señor y Dios nuestro, que quisiste que Cristo, tu Hijo, nacido en Belén, se manifestase como luz de las naciones; escucha nuestras plegarias y haznos festejar tu gloria, porque adornas con la victoria a los humildes, y llenas el mundo entero con tu esplendor. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Alimentados por el Cuerpo y la Sangre de tu Verbo encarnado, te pedimos, Señor, que estos divinos misterios, recibidos con gozo en la memoria de la santísima Virgen María, nos hagan siempre partícipes de la divinidad de tu Hijo. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Domingo 12 de enero:
FIESTA DEL BAUTISMO DEL SEÑOR
Color blanco. Misa y lecturas propias de este domingo (leccionario I-A). Gloria. Credo. Prefacio propio. Plegaria Eucarística III.
La gracia, el amor y la paz de Jesucristo el Señor, el Hijo amado del Padre, estén con todos vosotros.
Monición de entrada y aspersión con el agua bendecida: Hermanos, comencemos esta celebración Eucarística del domingo en el que recordamos el Bautismo del Señor, fiesta con la que terminamos el ciclo de Navidad, invocando a Dios Padre todopoderoso, para que bendiga esta agua, que va a ser derramada sobre nosotros en memoria de nuestro bautismo, y pidámosle que nos renueve interiormente, para que permanezcamos fieles al Espíritu que hemos recibido.
Dios todopoderoso y eterno, que por medio del agua, fuente de vida y medio de purificación, quisiste limpiarnos del pecado y darnos el don de la vida eterna, dígnate bendecir + esta agua, para que sea signo de tu protección en este día consagrado a ti, Señor. Por medio de esta agua renueva también en nosotros la fuente viva de tu gracia, y líbranos de todo mal de alma y cuerpo, para que nos acerquemos a ti con el corazón limpio y recibamos dignamente tu salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Que Dios todopoderoso nos purifique del pecado y, por la celebración de esta Eucaristía, nos haga dignos de participar del banquete de su reino. Amén.
Señor ten piedad y Gloria.
Colecta: Dios todopoderoso y eterno, que en el bautismo de Cristo, en el Jordán, al enviar sobre él tu Espíritu Santo, quisiste revelar solemnemente a tu Hijo amado, concede a tus hijos de adopción, renacidos del agua y del Espíritu Santo, perseverar siempre en tu benevolencia. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Oremos, hermanos, al Dios y Padre de Jesucristo, nuestro Salvador, que quiso ser bautizado por Juan en las aguas del Jordán para santificar nuestro Bautismo y renovar por él al hombre caído, y pidámosle que se compadezca de todos nosotros.
1. Por la Iglesia, pueblo de bautizados; para que proclamemos ante el mundo las maravillas de Dios que nos ha trasladado de las tinieblas a su luz admirable. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones al ministerio sacerdotal en nuestra diócesis; para que tengamos siempre sacerdotes que realicen con gozo la misión de predicar el evangelio, hacer discípulos de Cristo y bautizar a los creyentes. Roguemos al Señor.
3. Por la paz, la justicia y la solidaridad entre los hombres y los pueblos; para que Cristo, el Elegido de Dios para llevar el derecho a las naciones, ilumine a los que buscan a Dios con sinceridad de corazón y les haga oír la voz potente y magnífica del Padre. Roguemos al Señor.
4. Por los que viven oprimidos por el mal; para que el Mesías, el Enviado del Padre, que no quiebra la caña cascada ni apaga el pábilo vacilante, se apiade de ellos y les conceda la libertad interior. Roguemos al Señor.
5. Por todos nosotros, regenerados por el Baño del Agua y del Espíritu; para que Jesús, el Hijo amado, que quiso ser bautizado en el Jordán, nos haga descubrir y amar la grandeza del bautismo cristiano, don del amor de Dios a la humanidad. Roguemos al Señor.
Padre todopoderoso, que en la persona de tu Hijo amado nos has revelado a tu servidor, enviado tuyo al mundo para liberarnos e iluminarnos, y que haces resonar tu voz magnífica en las aguas del Bautismo; escucha nuestras oraciones y concede a los bautizados cumplir fielmente las promesas de su Bautismo siendo testigos valientes de la fe, para ser así dignos de la salvación que Cristo nos adquirió por su Sangre. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Señor, alimentados con estos dones sagrados, imploramos de tu bondad, que, escuchando fielmente a tu Unigénito, de verdad nos llamemos y seamos hijos tuyos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Bendición solemne:
* Dios, fuente de todo consuelo, disponga vuestros días en su paz y os otorgue el don de su bendición.
* Que él os libre de toda perturbación y afiance vuestros corazones en su amor.
* Para que, enriquecidos por los dones de la fe, la esperanza y la caridad, abundéis en esta vida en buenas obras y alcancéis sus frutos en la eterna.
* Y la bendición de Dios todopoderoso…
Lunes 13 de enero:
Misa votiva de la Santísima Trinidad
Color verde. Misas votivas nº 1. Lecturas de feria (leccionario III-par)
Prefacio de la solemnidad de la Sma. Trinidad. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, al comenzar la celebración de la Eucaristía, celebración de alabanza al Padre, por Jesucristo, el Hijo, en la unidad del Espíritu Santo, pidamos a Dios que nos conceda la conversión de nuestros corazones; así obtendremos la reconciliación y se acrecentará nuestra comunión con Dios y con nuestros hermanos.
* Tú que eres la Imagen viva del Padre.
* Tú que eres el Hijo de Dios vivo.
* Tú que eres el Ungido por el Espíritu Santo.
Colecta: Dios Padre, que, al enviar al mundo la Palabra de la verdad y el Espíritu de la santificación, revelaste a los hombres tu admirable misterio, concédenos, al profesar la fe verdadera, reconocer la gloria de la eterna Trinidad y adorar la Unidad en su poder y grandeza. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Con confianza de hijos presentemos nuestras peticiones a Dios Padre, que en Jesucristo nos llama a la conversión.
1. Por la santa Iglesia, llamada a ser signo de conversión para todos los pueblos del mundo. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones a dejar las redes y seguir a Jesús como pescadores de hombres. Roguemos al Señor.
3. Por el entendimiento entre las naciones y la paz en el mundo entero. Roguemos al Señor.
4. Por los pobres, por los que sufren, por los humildes, por los que pasan cualquier tipo de necesidad. Roguemos al Señor.
5. Por todos nosotros aquí reunidos llamados por Jesucristo a la conversión y a creer en el Evangelio. Roguemos al Señor.
Dios y Padre nuestro, que nos llamas a seguirte y a anunciar la llegada de tu Reino; escucha nuestras oraciones y concédenos cuanto con fe te hemos suplicado. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Señor y Dios nuestro, la recepción de este sacramento y la profesión de fe en la santa y eterna Trinidad y en su Unidad indivisible nos aprovechen para la salvación del alma y del cuerpo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Martes 14 de enero:
Misa por la Iglesia
Color verde. Misas por diversas necesidades nº 1-D.
Lecturas de feria. Prefacio dominical VIII. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, comencemos la celebración de la Eucaristía, en la que toda la Iglesia se alimenta de la escucha de la Palabra de Dios y de la comunión del Cuerpo y de la Sangre de Cristo, poniéndonos en la presencia del Señor, reconociendo lo que hay de pecado en nosotros, y suplicando que el Espíritu de Dios renueve nuestras vidas.
* Tú que eres el camino que conduce al Padre.
* Tú que eres la verdad que ilumina los pueblos.
* Tú que eres la vida que renueva el mundo.
Colecta: Dios todopoderoso y eterno, que en Cristo revelaste tu gloria a todas las naciones, guarda la obra de tu misericordiosa, para que la santa Iglesia, extendida por toda la tierra, persevere con fe firme en la confesión de tu nombre. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Dirijamos ahora nuestras súplicas confiadas a Dios nuestro Padre.
1. Por la Iglesia, por el Papa, los obispos y los sacerdotes, llamados a enseñar con la autoridad de Jesucristo. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones sacerdotales y religiosas, por todos aquellos que quieren seguir a Jesucristo con fidelidad. Roguemos al Señor.
3. Por todas las naciones, por sus gobernantes y políticos, por los que de distintos modos trabajan por la justicia, la libertad y la paz. Roguemos al Señor.
4. Por los que viven atormentados por el mal y por todo tipo de espíritu inmundo que no les deja ser libres. Roguemos al Señor.
5. Por los que celebramos esta Eucaristía, por nuestra comunidad (parroquia), por la amistad entre nosotros, por nuestros difuntos. Roguemos al Señor.
Señor, cuyo Hijo Jesucristo enseña con autoridad y sana con poder y amor, atiende nuestras plegarias y haz que, con la ayuda de tu gracia, no nos dejemos seducir jamás por el poder del maligno. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Señor, gobierna con bondad a tu Iglesia, alimentada en esta mesa santa, para que, dirigida por tu mano poderosa, tenga cada vez mayor libertad y persevere en la integridad de la fe. Por Jesucristo nuestro Señor.
Miércoles 15 de enero
Misa de feria
Color verde. Misa de la semana XX. Lecturas de feria.
Prefacio común I. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, comencemos la celebración de la Eucaristía poniéndonos ante Jesús, el Señor, muerto para liberarnos del pecado y resucitado para darnos nueva vida, y pidámosle en silencio perdón por todos nuestros pecados.
* Tú, que eres la plenitud de la verdad y de la gracia.
* Tú, que te has hecho pobre para enriquecernos.
* Tú, que has venido para hacer de nosotros tu pueblo santo.
Colecta: Oh, Dios, que has preparado bienes inefables para los que te ama, infunde la ternura de tu amor en nuestros corazones, para que, amándote en todo y sobre todas las cosas, consigamos alcanzar tus promesas, que superan todo deseo. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Elevemos a Dios Padre las oraciones y súplicas que llevamos dentro del corazón.
1. Por nuestra diócesis de N., por nuestro obispo N., por los responsables de la pastoral diocesana. Roguemos al Señor.
2. Por los jóvenes que se preparan para el sacerdocio o en los noviciados de vida religiosa. Roguemos al Señor.
3. Por los que gobiernan los pueblos y por todos los que tienen responsabilidades en la vida pública. Roguemos al Señor.
4. Por los parados, por los jóvenes que no pueden trabajar, por los pequeños empresarios que viven dificultades. Roguemos al Señor.
5. Por los que celebramos esta Eucaristía, y que agolpados a la puerta, buscamos a Jesús. Roguemos al Señor.
Atiende, Dios de misericordia, las oraciones de tu pueblo suplicante, y haz que en todo momento busquemos a tu Hijo Jesucristo. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Poscomunión: Después de haber participado de Cristo por estos sacramentos, imploramos humildemente tu misericordia, Señor, para que, configurados en la tierra a su imagen, merezcamos participar de su gloria en el cielo. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Jueves 16 de enero:
Misa votiva de la Sagrada Eucaristía
Color verde. Misas votivas nº 5. Lecturas de feria.
Prefacio I de la Sagrada Eucaristía. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: El Señor Jesús, nos invita un día más a participar de la mesa de la Palabra y de la Eucaristía. Reconozcamos ahora, al comienzo de la celebración, que somos pecadores e indignos de acercarnos a recibir su Cuerpo y su Sangre; y pidamos por ello sinceramente perdón a Dios.
* Tú que eres el Pan del cielo
* Tú que tienes palabras de vida eterna
* Tú que nos invitas a tu mesa
Colecta: Oh Dios, que por el Misterio pascual de tu Unigénito realizaste la redención de los hombres, concédenos por tu bondad experimentar el aumento continuo de tu salvación a quienes, celebrando los sacramentos, proclamamos con fe la muerte y Resurrección de tu Hijo. Él, que vive y reina contigo.
Oración de los fieles: Dirijamos ahora nuestras oraciones a Dios Padre todopoderoso, que se compadece de nuestra debilidad.
1. Por toda la Iglesia, por el Papa, los obispos y los sacerdotes, por todos aquellos que quieren seguir a Jesucristo. Roguemos al Señor.
2. Por el aumento de vocaciones a los diferentes estados de la vida cristiana, sobre todo a la vocación sacerdotal y religiosa. Roguemos al Señor.
3. Por todos los países del mundo, especialmente por aquellos que sufren las consecuencias de una riqueza mal repartida. Roguemos al Señor.
4. Por los ancianos, los enfermos y los que se encuentran solos, por aquellos que trabajan por el bien de sus hermanos. Roguemos al Señor.
5. Por los que ahora estamos reunidos en esta Eucaristía, y que necesitamos ser limpiados de la lepra del mal. Roguemos al Señor.
Dios de bondad y de misericordia, escucha la oración de tus hijos, y límpianos de todas las lepras del pecado que nos esclaviza. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Te rogamos, Señor, que la participación en la mesa celestial nos santifique para que, por el Cuerpo y en la Sangre de Cristo, se afiance la unión de todos los hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Viernes 17 de enero:
San Antonio, abad. MEMORIA OBLIGATORIA
Color blanco. Misa propia. Lecturas de feria. Prefacio de las santas vírgenes y religiosos. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, al comenzar la celebración de la Eucaristía en la memoria de San Antonio, Abad y padre de los monjes, pensemos en las muchas veces que por culpa de nuestros pecados nos hemos desviado del camino marcado por Cristo, y pidamos por ellos perdón al Señor.
* Tú que nos invitas a dejarlo todo y a seguirte.
* Tú que en el silencio del desierto nos haces oír tu voz.
* Tú que nos llamas a vivir siempre en amistad contigo.
Colecta: Oh, Dios, que concediste a san Antonio, abad, servirte en el desierto con una vida admirable, concédenos, por su intercesión, que, negándonos a nosotros mismos, te amemos siempre y sobre todas las cosas. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Acudamos confiados ahora a Dios, nuestro Padre, que quiere levantarnos de nuestra postración, y presentémosle nuestras plegarias.
1. Por toda la Iglesia, por nuestra comunidad parroquial y todas las comunidades cristianas en el mundo. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones al ministerio sacerdotal y a la vida consagrada en nuestra diócesis. Roguemos al Señor.
3. Por nuestros gobernantes y por todos los que tienen responsabilidades en la sociedad. Roguemos al Señor.
4. Por los enfermos que sufren parálisis y dependen para todo de los demás. Roguemos al Señor.
5. Por nosotros, pobres pecadores, e indignos siervos de Dios. Roguemos al Señor.
Dios y Padre de misericordia, que enviaste a tu Hijo para sanar los corazones y los cuerpos enfermos, escucha nuestras oraciones y perdona con tu amor misericordioso todos nuestros pecados. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Señor, haz que, alimentados provechosamente con tus sacramentos, superemos las asechanzas del enemigo, como concediste a san Antonio obtener admirables victorias sobre el poder de las tinieblas. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Sábado 18 de enero:
Día I del octavario de oración por la unidad de los cristianos
Misa por la unidad de los cristianos
Color verde. Misas por diversas necesidades nº 13-A.
El Señor Jesús, que quiere que todos seamos uno, esté con vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Hoy comenzamos en toda la Iglesia el octavario de oración por la unidad de los cristianos. Durante estos días, tendremos muy presente en la celebración de la Eucaristía la aspiración unánime de todas las Iglesias a la unidad. La preocupación por el reestablecimiento de la unidad es cosa de toda la Iglesia, tanto de los fieles como de los pastores, y nos afecta a todos y a cada uno de nosotros según nuestra propia capacidad.
Ahora, al comenzar la celebración de la Eucaristía, pidamos perdón humildemente a Dios nuestro Señor por las veces que hemos creado división alrededor nuestro y en el seno de la Iglesia por haber pecado.
Yo confieso…
Colecta: Dios todopoderoso y eterno, que reúnes lo que está disperso y conservas lo que has unido, mira con amor al pueblo de tu Hijo, para que cuantos han recibido un mismo bautismo, vivan unidos por la fe y por el mismo amor. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Elevemos, hermanos, con fe nuestras súplicas a Dios, principio de unidad y de paz, y pidámosle que escuche las oraciones que todos los creyentes en Cristo le dirigimos estos días:
1. Para que el Señor, que ha enviado a su Verbo al mundo para congregar en la unidad a sus hijos dispersos, aleje de su Iglesia todo germen de discordia y división. Roguemos al Señor.
2. Para que no falten en la Iglesia sacerdotes santos, que trabajen y luchen por conseguir la unidad, deseo de Cristo. Roguemos al Señor.
3. Para que Dios, que creó al hombre a su imagen y semejanza, destruya todas las murallas que dividen y separan a los hombres, los pueblos y las razas. Roguemos al Señor.
4. Para que aquellos hermanos nuestros que pertenecen a otras confesiones y sufren cualquier tipo de menosprecio por causa de las diferencias de su propia fe se sientan amados y acogidos por nosotros. Roguemos al Señor.
5. Para que nosotros mismos, ávidos de la palabra de Dios, nos adhiramos con fuerza a la confesión íntegra de nuestra fe, pero sin decaer en la caridad hacia los demás cristianos. Roguemos al Señor.
Señor, Padre santo, que en la sangre de tu Hijo y con la efusión de tu Espíritu Santo has establecido una alianza nueva y universal, escucha nuestras oraciones y haz que todos tus hijos lleguen a la unidad en la confesión de una fe única e íntegra y perseveren unidos en tu alabanza. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Poscomunión: Esta comunión, Señor, que significa la unión de los fieles en ti, realice también la unidad en tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Domingo 19 de enero:
DOMINGO II DEL TIEMPO ORDINARIO
Color verde. Misa y lecturas del domingo (leccionario I-A). Gloria. Credo. Prefacio por la unidad de los cristianos. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Tras haber celebrado festivamente los misterios del nacimiento del Señor, comenzamos los domingos del tiempo ordinario, en los que en la celebración de la Eucaristía seguiremos los pasos de Jesús por los pueblos y caminos de Galilea, escuchando sus palabras y contemplando sus acciones.
Este domingo se nos pide también una oración especial por la unidad de los cristianos, para que la unidad pedida por Jesucristo sea cada vez más una realidad.
Comencemos, pues, la celebración de los sagrados misterios reconociendo con humildad que somos pecadores y, sabiendo que Jesús es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, pidamos perdón a Dios con toda confianza por todas nuestras faltas.
* Cordero de Dios, obediente a la voluntad del Padre.
* Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.
* Cordero de Dios, que nos traes la salvación.
Gloria.
Colecta: Dios todopoderoso y eterno, que gobiernas a un tiempo cielo y tierra, escucha compasivo la oración de tu pueblo, y concede tu paz a nuestros días. Por nuestro Señor Jesucristo.
Credo: Confesemos ahora todos juntos nuestra fe en Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, en la unidad de la Iglesia.
Oración de los fieles: Confiando en la fuerza que nos da la luz de Cristo, presentemos nuestras oraciones y súplicas confiadas a Dios, nuestro Padre.
1. Para que todos los bautizados en Cristo estemos siempre unidos con un mismo pensar y sentir, superando las divisiones y discordias. Roguemos al Señor.
2. Para que surjan abundantes vocaciones al ministerio sacerdotal para nuestra diócesis de N., y tengamos siempre sacerdotes entregados al servicio de nuestras comunidades. Roguemos al Señor.
3. Para que la sociedad recobre la conciencia de pecado, y luchando contra él, trabaje por la justicia, la paz y la libertad. Roguemos al Señor.
4. Para que todos los que se encuentran oprimidos por el peso del pecado descubran en Jesús al Cordero que quita el pecado del mundo. Roguemos al Señor.
5. Para que todos nosotros proclamemos la salvación que el Padre nos ha dado en Cristo, dando testimonio de que Jesús es el Hijo de Dios. Roguemos al Señor.
Oh Padre, que en Cristo, Cordero pascual y luz de las naciones, llamas a todos los hombres a formar el pueblo de la nueva alianza; escucha nuestras súplicas y confirma en nosotros la gracia del bautismo con la fuerza de tu Espíritu, de modo que toda nuestra vida proclame el feliz anuncio del Evangelio. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Derrama, Señor, en nosotros tu Espíritu de caridad, para que hagas vivir concordes en el amor a quienes has saciado con el mismo pan del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Bendición solemne:
* El Señor os bendiga y os guarde.
* Haga brillar su rostro sobre vosotros y os conceda su favor,
* Vuelva su mirada a vosotros y os conceda la paz.
Lunes 20 de enero:
Día III del octavario de oración por la unidad de los cristianos
Conmemoración de san Sebastián, mártir
Colecta propia; resto por la unidad de los cristianos,
Misas por diversas necesidades nº 13-A.
El Señor Jesús, que quiere que todos seamos uno, esté con vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Dentro del octavario por la unidad de los cristianos, recordamos en la celebración de la Eucaristía a san Sebastián, quien, con toda probabilidad, fue un soldado milanés que dio la vida por su fe en Jesús a comienzos del siglo IV bajo la persecución de Diocleciano. Es uno de los mártires de los primeros siglos que el pueblo cristiano más ha venerado y su imagen, muy popular, representa el momento en el que se le tortura siendo asaeteado.
A nosotros, se nos pide que seamos también testigos de Cristo en nuestra vida por medio de la fe y de las buenas obras. Sin embargo, constantemente fallamos en este cometido. Por ello, al comenzar la celebración de los sagrados misterios, reconozcamos nuestros pecados y pidamos humildemente perdón a Dios por ellos.
Yo confieso…
Colecta: Concédenos, Señor, el espíritu de fortaleza para que, aleccionados por el ejemplo glorioso de tu mártir san Sebastián, aprendamos a obedecerte a ti antes que a los hombres. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Oremos, hermanos, al Señor, Dios de todo consuelo, y pidámosle que escuche las oraciones de sus hijos que sufren a causa de las divisiones de la Iglesia.
1. Para que el Señor conceda un verdadero espíritu de humildad a todos los católicos, de manera que ofrezcamos a los demás cristianos nuestras propias comunidades como un hogar acogedor. Roguemos al Señor.
2. Para que no falten nunca en nuestra diócesis pastores que cumplan su ministerio con espíritu de abnegación, dispuestos a dar su vida por el pueblo que les sea encomendado. Roguemos al Señor.
3. Para que los responsables de las distintas comunidades humanas alejen de sus pueblos los odios y las discriminaciones de orden religioso, ideológico y político. Roguemos al Señor.
4. Para que los que en la defensa de la fe encuentran el peligro o la muerte permanezcan, al igual que San Sebastián, firmes en la verdad y serenos en su confianza en Jesucristo. Roguemos al Señor.
5. Para que el Señor nos libere de juzgar o condenar a los hermanos de las demás confesiones cristianas y nos haga crecer en el amor los unos a los otros. Roguemos al Señor.
Escucha, Padre santo, la oración unánime que te dirigen las comunidades cristianas y reúne a todos tus hijos en la unidad de tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Poscomunión: Esta comunión, Señor, que significa la unión de los fieles en ti, realice también la unidad en tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Martes 21 de enero:
Día IV del octavario de oración por la unidad de los cristianos
Santa Inés, virgen y mártir. MEMORIA OBLIGATORIA
Colecta propia; resto por la unidad de los cristianos,
Misas por diversas necesidades nº 13-B.
El Señor Jesús, que quiere que todos seamos uno, esté con todos vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, antes de celebrar la entrega de Jesús en sacrificio y en manjar eucarístico en el día en que recordamos a Santa Inés, que consagró con el martirio el título de la castidad, pidamos perdón a Dios por nuestras culpas y pecados, reconociendo que muchas veces no hemos sido instrumentos de comunión y de unidad en la Iglesia.
Yo confieso…
Colecta: Dios todopoderoso y eterno, que eliges lo débil del mundo para confundir a los fuertes, concédenos, en tu bondad, a cuantos celebramos el nacimiento para el cielo de tu mártir santa Inés, imitar su constancia en la fe. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Unamos ahora nuestras voces y nuestros corazones a la oración de todos los cristianos, para pedir a Dios nuestro Padre un solo rebaño bajo la guía de un solo Pastor.
1. Para que se acerque el día en el que todos los que creemos en Cristo podamos participar con alegría del pan de la unidad y de la copa de la alianza. Roguemos al Señor.
2. Para que el Espíritu de Dios suscite santas y abundantes vocaciones al ministerio sacerdotal al servicio de nuestra diócesis, que nos anuncien que sólo hay un Dios, una fe y un Bautismo. Roguemos al Señor.
3. Para que arraiguen la paz y la amistad entre todos los pueblos y se aleje toda incomprensión, todo prejuicio y toda división. Roguemos al Señor.
4. Para que el Señor haga descubrir los dones de su gracia a todos los que lo invocan con rectitud de corazón. Roguemos al Señor.
5. Para que el testimonio de santa Inés nos haga a todos nosotros fuertes en el amor a Cristo y valientes en la confesión de nuestra fe. Roguemos al Señor.
Dios Padre celestial, Tú que eres el único que puede realizar lo que parece imposible a los hombres, escucha la oración de tus fieles para que cese la desunión de los cristianos y tu Iglesia sea consagrada en la unidad, por los medios y en el tiempo que tienes establecido. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Poscomunión: Señor, infunde en nosotros tu Espíritu de caridad, y, por la eficacia de este sacrificio, haz que cuantos creemos en ti vivamos unidos en un mismo amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Miércoles 22 de enero
Día V del octavario por la unidad de los cristianos
San Vicente, diácono y mártir. MEMORIA OBLIGATORIA
Color rojo. Misa propia. Lecturas de feria.
Prefacio de los santos mártires. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, antes de renovar el misterio de la muerte y resurrección de Cristo, y recordando hoy el martirio del diácono san Vicente, preparemos nuestro corazón con el arrepentimiento, y pidamos perdón a Dios por nuestros pecados, y por todas las veces que no hemos sido artífices de comunión y de unidad en la Iglesia.
Yo confieso…
Colecta: Dios todopoderoso y eterno, infunde misericordiosamente en nosotros tu Espíritu, para que nuestros corazones rebosen de aquel intenso amor con el que san Vicente superó todos los tormentos corporales. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Oremos, hermanos, a Dios Padre todopoderoso, en cuyas manos está el destino del universo, y pidámosle confiadamente que escuche las oraciones de su pueblo que clama por la unidad de todos los creyentes en Cristo.
1. Por la Santa Iglesia de Dios, para que busque cada día con mayor afán el rostro de su Señor, y sus fieles de cualquier confesión se esfuercen en purificarse de todas su faltas y pecados que los llevan a la división. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones; para que el amor que abrasó la vida del diácono san Vicente se encienda en el corazón de los jóvenes de modo que vivan su fe con ilusión, generosidad y alegría. Roguemos al Señor.
1. Por los que gobiernan las naciones, para que trabajen con interés y constancia por la paz y el bienestar de sus súbditos, a fin de que reine entre los pueblos la justicia y la paz. Roguemos al Señor.
2. Por los enfermos, los encarcelados y por todos los que sufren, para que Dios, Padre de misericordia, venga en auxilio de sus males. Roguemos al Señor.
3. Por todos nosotros aquí reunidos; para que el Señor nos conceda el gozo de ver crecer el amor mutuo entre las distintas confesiones cristianas y nos reúna a todos, un día no lejano, en su única Iglesia. Roguemos al Señor.
Señor y Dios nuestro, que en Cristo, el Verbo eterno, nos has dado la plenitud de tu palabra, escucha la oración de la Iglesia que clama por la unidad, y haz que sintamos la urgencia de convertirnos a ti y de adherirnos con toda el alma al Evangelio, para que toda nuestra vida anuncie a los que dudan y viven alejados al único Salvador de los hombres, Jesucristo, tu Hijo y Señor nuestro, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Poscomunión: Te suplicamos, Señor, que el celestial alimento recibido nos comunique la misma fortaleza de espíritu que hizo a san Vicente ministro fiel en tu servicio y vencedor valiente en el martirio. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Jueves 23 de enero:
Día VI del octavario de oración por la unidad de los cristianos
San Ildefonso de Toledo. MEMORIA OBLIGATORIA
Colecta propia, resto por la unidad de los cristianos,
Misas por diversas necesidades nº 13-A.
Plegaria Eucarística V/d.
El Señor Jesús, que quiere que seamos uno, esté con todos vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, al comenzar la celebración de la Eucaristía en la memoria del obispo san Ildefonso de Toledo, acudamos confiadamente al que es Dios y Hombre, Hijo del Padre y hermano nuestro, para pedirle perdón por todos nuestros pecados, y por las veces que no hemos sido artífices de comunión y de unidad en la Iglesia.
Yo confieso…
Colecta: Dios todopoderoso, que hiciste a san Ildefonso insigne defensor de la virginidad de María, concede a los que creemos en este privilegio de la Madre de tu Hijo sentirnos amparados por su poderosa y materna intercesión. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Oración de los fieles: Presentemos nuestra oración a Dios Padre, que ha prometido escuchar la oración de los que se reúnen en nombre de su Hijo, pidiendo especialmente por la unidad de los cristianos.
1. Por el Papa y sus hermanos, los obispos de todo el mundo y de toda confesión, por los presbíteros y diáconos de toda la Iglesia; para que vivan siempre en comunión de amor unos con otros. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones al ministerio sacerdotal; para que nunca falten en la Iglesia pastores que, como san Ildefonso, brillen por su doctrina y por el celo en explicar los misterios cristianos a los fieles. Roguemos al Señor.
3. Por los responsables de la justicia social y de la unión de las naciones en la paz; para que con la ayuda de Dios puedan establecer entre los pueblos relaciones de amor, de concordia y de paz. Roguemos al Señor.
4. Por todos los que en sus penas y aflicciones se creen abandonados; para que encuentren en sus hermanos signos de amistad y de comprensión que los consuelen. Roguemos al Señor.
5. Por nosotros y por los miembros de nuestra comunidad, para que nuestra fidelidad al Evangelio nos purifique de todo tipo de sectarismo y nos disponga a acoger siempre con comprensión a todos los que no piensan como nosotros. Roguemos al Señor.
Señor, que eres el único que puede realizar aquello que a los hombres nos parece imposible, escucha las oraciones de tus fieles, haz que cese la división de tu Iglesia y que tu pueblo rechace el escándalo de la desunión. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Poscomunión: Esta comunión, Señor, que significa la unión de los fieles en ti, realice también la unidad en tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Viernes 24 de enero:
Día VII del octavario de oración por la unidad de los cristianos
San Francisco de Sales, obispo y doctor.
MEMORIA OBLIGATORIA
Color blanco. Misa propia. Lecturas de feria.
Prefacio de la unidad de los cristianos. Plegaria Eucarística II.
El Señor Jesús, que quiere que todos seamos uno, esté con vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, para que la celebración del sacrificio eucarístico que ahora comenzamos recordando la memoria del obispo y doctor san Francisco de Sales, sea más fructuosa, purifiquemos nuestros corazones pidiendo al Señor perdón por todos nuestros pecados, especialmente por aquellos que han dañado la comunión entre todos los miembros de la Iglesia.
Yo confieso…
Colecta: Oh, Dios, tú has querido que el santo obispo Francisco de Sales se hiciera todo para todos por la salvación de las almas, concédenos, en tu bondad, a ejemplo suyo, manifestar siempre la dulzura de tu amor en el servicio a los hermanos. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Elevemos, hermanos, nuestras plegaria a Dios para que se realice la unión de todos los cristianos, en la medida, el tiempo y por los medios que Él quiere.
1. Por todas las Iglesias y comunidades cristianas, para que el Espíritu Santo nos haga vivir con mayor intensidad cada día el sufrimiento de la mutua división. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones sacerdotales y religiosas al servicio de nuestra diócesis; para que no falten quienes anuncien íntegramente el Evangelio a todos los cristianos de nuestras comunidades. Roguemos al Señor.
3. Por todos los que gobiernan las distintas naciones del mundo; para que los responsables del orden social promuevan la justicia, la amistad y la concordia entre todos los pueblos. Roguemos al Señor.
4. Por los periodistas y los responsables de las comunicaciones sociales; para que Dios les conceda aquel celo ardiente y aquella suave mansedumbre que resplandecieron en san Francisco de Sales. Roguemos al Señor.
5. Por todos nosotros; para que como María, permanezcamos dispuestos a entregarnos generosamente por la causa de la unidad de los discípulos de Jesús. Roguemos al Señor.
Concédenos, Dios todopoderoso, a todos los que profesamos nuestra fe en Cristo, tu Hijo, y proclamamos su resurrección, que trabajemos también con valentía para que todas las Iglesias que se glorían del nombre cristiano sean congregadas en la unidad. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Poscomunión: Dios todopoderoso, por estos sacramentos que hemos recibido, concédenos que, imitando en la tierra el amor y mansedumbre de san Francisco de Sales, alcancemos también la gloria del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Sábado 25 de enero:
Día VIII del octavario de oración por la unidad de los cristianos
La conversión de San Pablo. FIESTA
El Señor Jesús, que cautivó el corazón de san Pablo, esté con todos vosotros.
Monición de entrada y acto penitencial: Hoy finalizamos el octavario de oración por la unidad de los cristianos; y lo hacemos recordando un momento importante y crucial en la historia del cristianismo, como es la Conversión del Apóstol san Pablo, quien tras haberse encontrado cara a cara con Jesucristo pasó de ser un encarnizado perseguidor de los cristianos a convertirse en un firme defensor y propagador del mensaje del Evangelio.
Comencemos, pues, la celebración de la Eucaristía reconociendo que nuestra fe y nuestras obras no siempre van unidas, que a menudo cometemos fallos en la vida y que nuestro apostolado cristiano deja mucho que desear. Por eso, con humildad y sencillez, pedimos perdón a Dios por nuestros pecados.
Yo confieso…
Señor ten piedad y Gloria.
Colecta: Oh Dios, que has instruido al mundo entero con la predicación de san Pablo, apóstol, concede a cuantos celebramos hoy su conversión, avanzar hacia ti, siguiendo su ejemplo, y ser en el mundo testigos de tu verdad. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Oremos, hermanos, a Dios, Padre misericordioso, que ha querido que fuéramos edificados en la solidez de la fe a través de las enseñanzas de san Pablo, el apóstol de los gentiles.
1. Para que la Iglesia conserve sin alterar en todo el mundo la enseñanza que, en sus orígenes, recibió a través de la predicación apostólica y la transmita con fidelidad de generación en generación. Roguemos al Señor.
2. Para que Jesucristo, que fascinó a Pablo y transformó radicalmente su vida, atraiga con amor a muchos jóvenes al ministerio sacerdotal y los envíe a anunciar el Evangelio. Roguemos al Señor.
3. Para que los gobernantes que se empeñan en vivir de espaldas a Dios experimenten su propio “camino de Damasco” y reconozcan el poder salvador del Señor resucitado. Roguemos al Señor.
4. Para que quienes hoy sufren persecución, como san Pablo, por causa del nombre de Cristo, sean semilla de una nueva primavera de vida cristiana en nuestros días. Roguemos al Señor.
5. Para que el Señor, que iluminó a todo el universo con los escritos del apóstol de los gentiles, nos ilumine también a nosotros con la claridad de su Evangelio. Roguemos al Señor.
Señor, que con tu poder confirmaste el valiente testimonio de san Pablo, escucha la oración de tu Iglesia y llénala de la fuerza y la sabiduría del Espíritu, para que sea, también hoy, mensajera de tu Evangelio en el mundo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Poscomunión: Señor Dios nuestro, que los sacramentos recibidos acrecienten en nosotros aquel ardor de la caridad que abrasó al apóstol san Pablo y le impulsó al cuidado de todas las Iglesias. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Oración sobre el pueblo: Vuelve, Señor, hacia ti el corazón de tu pueblo; y tú que le concedes tan grandes intercesores no dejes de orientarle con tu continua protección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Domingo 26 de enero:
DOMINGO III DEL TIEMPO ORDINARIO
Color verde. Misa y lecturas del domingo (leccionario I-A). Gloria. Credo.
Prefacio dominical X. Plegaria Eucarística III.
Monición de entrada y acto penitencial: De nuevo nos hemos reunido para celebrar la Eucaristía en el domingo, día en el que la comunidad cristiana hace memoria del Señor resucitado, que se hace presente en medio de nosotros, reunidos en su nombre.
Hoy, además, se nos invita a poner el acento de un modo especial en que este domingo, es el domingo de la Palabra de Dios, una ocasión especial para hacer crecer en el pueblo de Dios la familiaridad religiosa y asidua con la Sagrada Escritura.
Comencemos, pues, respondiendo a la invitación que Jesús nos hace a la conversión para acoger la luz que Él nos trae, y reconociendo ante Él nuestros pecados, pidámosle perdón desde lo más profundo de nuestro corazón.
* Tú, que eres nuestra luz y salvación.
* Tú, que eres la defensa de nuestra vida.
* Tú, que nos llamas a seguirte con fidelidad.
Gloria.
Colecta: Dios todopoderoso y eterno, orienta nuestros actos según tu voluntad, para que merezcamos abundar en buenas obras en nombre de tu Hijo predilecto. Por nuestro Señor Jesucristo.
Credo: Confesemos ahora la fe que, cimentada en la Palabra de Dios y en la Tradición de la Iglesia, se nos ha ido transmitiendo de generación en generación.
Oración de los fieles: Presentemos ahora a Dios Padre todopoderoso nuestras oraciones por las necesidades espirituales y materiales de toda la humanidad.
1. Para que toda la Iglesia medite constante y asiduamente la Palabra de Dios y la transmita con fidelidad. Roguemos al Señor.
2. Para que no falten jóvenes generosos, dispuestos a renunciar a todo para seguir a Jesús, y consagrarse al anuncio del evangelio. Roguemos al Señor.
3. Para que todos los pueblos reconozcan en Cristo la luz que puede rescatarlos de la oscuridad y de las sombras, del error y de la ignorancia. Roguemos al Señor.
4. Para que todos los difuntos alcancen la dicha de gozar de la presencia del Señor en el país de la vida. Roguemos al Señor.
5. Para que todos nosotros sepamos dar el paso que pide la conversión, y anunciemos a toda la humanidad que está cerca el Reino de los cielos. Roguemos al Señor.
Oh Dios, que has fundado tu Iglesia en la fe de los Apóstoles; atiende las plegarias que te dirigimos y haz que nuestra comunidad, iluminada por tu palabra y unida en el vínculo de tu amor, se convierta en un signo de salvación y esperanza para todos los que en las tinieblas anhelan tu luz. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Concédenos, Dios todopoderoso, que cuantos hemos recibido tu gracia vivificadora nos gloriemos siempre del don que nos haces. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Bendición solemne:
* La paz de Dios, que sobrepasa todo juicio, custodie vuestros corazones y vuestros pensamientos en el conocimiento y el amor de Dios y de su Hijo Jesucristo, nuestro Señor.
* Y la bendición de Dios todopoderoso…
Lunes 27 de enero:
Misa de feria
Color verde. Misa de la semana XXI. Lecturas de feria.
Prefacio común II. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, para celebrar lo mejor posible la escucha de la palabra del Señor y la venida sacramental de Cristo a nuestro altar, pidamos perdón a Dios por nuestras faltas y pecados.
* Tú, que no has venido a condenar, sino a perdonar.
* Tú, que has dicho que hay gran fiesta en el cielo por un pecador que se arrepiente.
* Tú, que perdonas mucho a quien mucho ama.
Colecta: Oh, Dios, que unes los corazones de tus fieles en un mismo deseo, concede a tu pueblo amar lo que prescribes y esperar lo que prometes, para que, en medio de las vicisitudes del mundo, nuestros ánimos se afirmen allí donde están los gozos verdaderos. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Dirijamos ahora nuestras peticiones a Dios Padre, creador de todo lo bueno, pidiéndole que nuestro corazón no ande dividido entre el bien y el mal.
1. Para que el Espíritu Santo proteja y acompañe siempre a la Iglesia. Roguemos al Señor.
2. Para que Dios nos conceda los sacerdotes necesarios. Roguemos al Señor.
3. Para que entre todos los pueblos reinen la alegría y la paz. Roguemos al Señor.
4. Para que los que sufren puedan recibir la buena noticia de su liberación. Roguemos al Señor.
5. Para que todos nosotros glorifiquemos constantemente el nombre de Dios. Roguemos al Señor.
Dios y Padre nuestro, fuente de toda bondad, escucha las plegarias que tu pueblo te dirige y envíanos tu Espíritu Santo que nos ilumine y nos guíe en nuestro caminar. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Te pedimos, Señor, que realices plenamente en nosotros el auxilio de tu misericordia, y haz que seamos tales y actuemos de tal modo que en todo podamos agradarte. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Martes 28 de enero:
Santo Tomás de Aquino, doctor. MEMORIA OBLIGATORIA
Color blanco. Colecta propia, resto del común de doctores 1.
Lecturas de feria.
Prefacio de los santos pastores. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, al celebrar hoy la memoria de santo Tomás de Aquino, patrono de los teólogos y gran doctor de la Iglesia, a quien el Señor llenó de espíritu de sabiduría e inteligencia para ilustrar la fe con su predicación y sus escritos preparémonos a la celebración de la Eucaristía, en la cual Jesucristo vela su humanidad y su divinidad, reconociendo nuestros pecados y pidiendo perdón por ellos.
* Tú que eres la fuente de agua viva
* Tú que eres la luz que ilumina en las tinieblas
* Tú que eres la auténtica sabiduría escondida
Colecta: Oh Dios, que hiciste a santo Tomás de Aquino digno de admiración por su ardoroso anhelo de santidad y por el estudio de las ciencias sagradas, concédenos comprender lo que él enseñó e imitar plenamente lo que realizó. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Oremos a Dios, Padre de todos los hombres, pidiéndole que sepamos cumplir siempre su voluntad.
1. Por la Iglesia; para que cumpla siempre y en todo momento la voluntad de Dios, y nunca le falten vocaciones sacerdotales y religiosas. Roguemos al Señor.
2. Por los teólogos; para que siguiendo el ejemplo de Santo Tomás de Aquino, enriquezcan su estudio con la oración contemplativa y permanezcan en comunión con la Iglesia en todos sus avances y descubrimientos. Roguemos al Señor.
3. Por los pueblos de la tierra; para que superen todo lo que les desune y promuevan todo cuanto les acerca. Roguemos al Señor.
4. Por los estudiantes de las universidades y centros de estudio, y por todos los que buscan la verdad; para que sus esfuerzos por conseguirla en los distintos ámbitos del saber los lleve cada día más a Dios, origen y meta de la verdad plena. Roguemos al Señor.
5. Por todos nosotros; para que sepamos perdonar como Dios mismo nos perdona. Roguemos al Señor.
Señor y Dios nuestro, que nos tienes un lugar reservado en el seno de tu familia, guarda con amor a tu pueblo y concédele vivir siempre llevando a cabo tu voluntad. Por Jesucristo nuestro Señor.
Para que Dios conceda a los teólogos imitar a Santo Tomás de Aquino, uniendo el estudio a la oración. Roguemos al Señor.
Para que Dios conceda a los estudiantes el deseo de iluminar los conocimientos humanos con la profundización de una fe enriquecida en el amor. Roguemos al Señor.
Poscomunión: A cuantos alimentas con Cristo, Pan de vida, instrúyelos, Señor, con la enseñanza de Cristo Maestro, para que, en la fiesta de santo Tomás de Aquino, conozcan tu verdad y la realicen en el amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Miércoles 29 de enero:
Misa de feria
Color verde. Misa de la semana XXII. Lecturas de feria.
Prefacio común III. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, plenamente confiados en el perdón del Hijo de Dios, que vino a salvar a los pecadores, comencemos la celebración de los sagrados misterios pidiendo a Dios compasión y misericordia por nuestros pecados y miserias.
* Tú, que has venido a buscar al que estaba perdido.
* Tú, que has querido dar la vida en rescate por todos.
* Tú, que reúnes a tus hijos dispersos.
Colecta: Dios todopoderoso, que posees toda perfección, infunde en nuestros corazones el amor de tu nombre y concédenos que, al crecer nuestra piedad, alimentes todo bien en nosotros y con solicitud amorosa lo conserves. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Elevemos ahora nuestras súplicas a Dios nuestro Señor, que siembra en nuestro mundo la simiente de su palabra.
1. Por la Santa Iglesia; para que siembre siempre la Palabra de Dios en los corazones. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones sacerdotales; para que Dios nos conceda los sacerdotes necesarios. Roguemos al Señor.
3. Por los pueblos de toda la tierra; para que vivan en concordia y paz verdadera. Roguemos al Señor.
4. Por los trabajadores que están en paro; para que encuentren pronto un trabajo digno. Roguemos al Señor.
5. Por nosotros mismos y nuestras familias; para que seamos tierra buena donde germine el Evangelio. Roguemos al Señor.
Padre de misericordia y de bondad; escucha las oraciones de tu pueblo y haz que tu palabra germine y fructifique en nosotros para nuestra salvación y la de todos los hombres. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Saciados con el pan de la mesa del cielo, te pedimos, Señor, que este alimento de la caridad fortalezca nuestros corazones y nos mueva a servirte en nuestros hermanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Jueves 30 de enero:
Misa por la paz y la reconciliación
Color verde. Misas por diversas necesidades nº 30, colecta B-2.
Lecturas de feria. Plegaria Eucarística de la Reconciliación II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hoy vamos a pedir de un modo especial en la celebración de la Eucaristía por la paz y la justicia, una realidad nunca del todo hecha y siempre por hacer, pues los cristianos no podemos desentendernos, sino que debemos aportar a él nuestro esfuerzo constante y nuestra oración perseverante al Príncipe de la paz.
Ahora, al comenzar esta celebración eucarística, pidamos a Dios que nos conceda la conversión de nuestros corazones; así obtendremos la reconciliación y se acrecentará nuestra comunión con Dios y con los hermanos.
* Tú que eres nuestra luz.
* Tú, que eres nuestra paz.
* Tú, que eres nuestra alegría.
Colecta: Dios de la paz, tú eres la paz misma, a quien el espíritu violento no comprende ni el corazón cruel acepta; haz que perseveren en el bien los que conviven en concordia y recuperen la paz, olvidando el mal, los que están enfrentados. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Oremos, hermanos, con toda confianza a Dios nuestro Padre, que tiene para todo hombre palabras de vida.
1. Por la Santa Iglesia; para que Dios se digne custodiarla y defenderla frente a todos los ataques que recibe. Roguemos al Señor.
2. Por nuestra diócesis; para que surjan en nuestras comunidades jóvenes dispuestos a asumir el servicio sacerdotal. Roguemos al Señor.
3. Por los que tienen poder en el mundo; para que hagan lo posible para que el bienestar y la prosperidad sean una realidad para todos. Roguemos al Señor.
4. Por los hambrientos y por los enfermos, por todos los que sufren por cualquier motivo; para que sean aliviados en su necesidad. Roguemos al Señor.
5. Por los que estamos aquí reunidos; para que vivamos en amor fraterno y formemos una comunidad de fe, esperanza y caridad. Roguemos al Señor.
Padre de bondad, que nos llamas a proclamar nuestra fe con la palabra y con nuestra vida, escucha lo que te hemos pedido y ayúdanos a tener siempre con los demás medidas de misericordia. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Concédenos, Señor, tu espíritu de caridad para que, alimentados con el Cuerpo y Sangre de tu Unigénito, fomentemos con la paz entre todos que él mismo dejó. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Viernes 31 de enero:
San Juan Bosco. MEMORIA OBLIGATORIA
Color blanco. Colecta propia y resto del común de santos educadores.
Lecturas de feria. Prefacio de los Santos Pastores. Plegaria Eucarística II.
Monición de entrada y acto penitencial: Hermanos, alrededor de la mesa eucarística que nos une como hermanos y miembros de la Iglesia, comencemos la celebración de los sagrados misterios en el día en el que recordamos al gran educador y apóstol de los jóvenes, San Juan Bosco, reconociendo nuestros pecados.
Yo confieso…
Colecta: Oh, Dios, que has suscitado en san Juan Bosco, presbítero, un padre y un maestro para los jóvenes, concédenos que, encendidos en su mismo fuego de caridad, podamos ganar almas para ti y solo a ti servirte. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración de los fieles: Presentemos ahora nuestras oraciones a Dios Padre, que nunca deja de velar por la Iglesia y por el mundo entero.
1. Por la Iglesia, signo de Cristo en medio del mundo. Roguemos al Señor.
2. Por las vocaciones sacerdotales y religiosas. Roguemos al Señor.
3. Por los que tienen alguna responsabilidad sobre los demás. Roguemos al Señor.
4. Por los que matan, secuestra, destruyen y hacen el mal. Roguemos al Señor.
5. Por nosotros, llamados a dar en el mundo fruto de buenas obras. Roguemos al Señor.
Dios y Padre nuestro, de quien viene todo crecimiento verdadero, escucha la oración de tu Iglesia y haz que la semilla de tu reino dé fruto entre nosotros. Por Jesucristo nuestro Señor.
Poscomunión: Dios todopoderoso, que este sagrado banquete nos ayude a manifestar con el corazón y las obras el amor fraterno y la luz de la verdad, siguiendo el ejemplo de san Juan Bosco. Por Jesucristo, nuestro Señor.