VI SEMANA DE PASCUA – 23-28/05/2022 – VI SETMANA DE PASQUA
|
LUNES Misa: Hch 16, 11-15; Sal 149, 1bc-2. 3-4. 5-6a y 9b; Jn 15, 26—16, 4ª El relato de los Hechos se redacta en primera persona del plural, “nosotros” y viene a ser como un diario de la misión. Seguramente es así porque Lucas es ahora el compañero de misión. Cuando Pablo pisa la playa de Neápolis, el Evangelio llega a Europa. Según los exegetas esto pudo ocurrir en la primavera del año 50. El relato del encuentro, conversión y Bautismo de Lidia, vendedora de púrpura, es bello y conmovedor: la Buena Nueva se transmite de corazón a corazón. Con palabra confidencial, Jesús anuncia en el Evangelio que el Espíritu dará testimonio de Él, como también sus discípulos. Ambos testimonios irán juntos: nadie puede ser testigo del Señor si no tiene el Espíritu de Dios en su corazón. MARTES Misa: Hch 16, 22-34; Sal 137, 1bcd-2a. 2bc-3. 7c-8; Jn 16, 5-11 El bello relato, que escuchamos ayer, de la conversión de Lidia y de su familia contrasta con el texto de hoy. En Filipos, Pablo y Silas sufren persecución: son desnudados, azotados con varas, molidos a palos y encarcelados en la mazmorra, con los pies inmovilizados en el cepo. En estas condiciones, se da como una especie de “teofanía” en forma de terremoto. El carcelero, en medio de la oscuridad, “pidió una lámpara“: será también la lámpara de luz de su fe. Pablo le dice claramente: “Cree en el Señor Jesús y te salvarás tú y tu familia“. “A aquellas horas de la noche” el carcelero recibe la instrucción catequética. Después recibe inmediatamente el Bautismo, junto con su familia, les prepara una mesa, la Eucaristía, y celebran una fiesta por haber creído en Dios. La fe es el motivo de la fiesta y de la alegría. Su noche se iluminó con una nueva luz, la del Señor, como la noche pascual. El texto del Evangelio de hoy es complicado teológicamente. El irse de Jesús no ha de ser motivo de tristeza, sino de alegría. Porque sólo yéndose puede enviar el Espíritu Santo. Por eso les dice: “Os conviene que yo me vaya”. El Espíritu revelará al mundo la injusticia de la muerte del Hijo de Dios. MIÉRCOLES Misa: Hch 17, 15. 22–18, 1; Sal 148, 1bc-2. 11-12. 13. 14; Jn 16,12-15 Pablo predica el célebre sermón en el Areópago de Atenas: “A quien veneráis sin conocerlo os lo anuncio yo“. Y anuncia con pasión e inteligencia, adaptándose a su mentalidad e incluso citando a un poeta pagano, el misterio del Dios vivo, creador, “en el cual vivimos, nos movemos y existimos y que todo hombre, aunque sea a tientas, busca“. La Resurrección de Jesús es la garantía de la verdad de lo que predica. Pero cuando escucharon la palabra “resurrección” “se lo tomaron en broma“. Fue un fracaso clamoroso. Sin embargo, “Dionisio, el areopagita, Dámaris y otros pocos se le juntaron y creyeron“. La semilla había sido sembrada. Es algo realmente contemporáneo de todos los tiempos que el Apóstol presente el cristianismo como el cumplimiento de la búsqueda del Dios vivo (Heb 17,27). Jesús completa, en el Evangelio, su enseñanza sobre el Espíritu Santo. Ellos ahora no pueden cargar con todo lo que el Señor dice, como tampoco podrán cargar con la Cruz, pero “el Espíritu de la verdad los llevará al conocimiento de la verdad plena“. Ésta no es de orden intelectual sino existencial: la verdad plena es Dios en la gloria de la Trinidad. El Espíritu será el pedagogo y el mistagogo de la Iglesia. JUEVES SAN FELIPE NERI, presbítero San Felipe Neri fue un “loco por Cristo“. Originario de Florencia, fue a vivir a Roma. Vivió pobre entre los pobres, en barrios marginales de la ciudad: de día en los hospitales y durante las noches en las catacumbas. Recibió la efusión del Espíritu Santo y se manifestó como apóstol, catequista y consejero de almas. Iba siempre con gente de toda condición, que le seguía en sus iniciativas. Con un grupo de sacerdotes fundó el Oratorio. Se ordenó de presbítero siendo ya mayor y por obediencia. Siempre se consideró el último de todos y el más indigno de los pecadores. La presencia del Espíritu Santo era en él casi por “rapto“. El carisma que vivió fuertemente fue la alegría: una alegría expansiva, desconcertante y estimulante. Con esta alegría murió. El médico, cuando ya agonizaba en su lecho de muerte, a los ochenta años de edad, le dijo: “Nunca le había visto tan contento como hoy“, y él respondió: “Qué alegría cuando me dijeron: Vamos a la casa del Señor“. A medianoche, en una pobrísima cámara, y habiendo bendecido a los sacerdotes que él había asociado, descansó en el Señor. Es patrón de Roma. Su vida merece ser estudiada. El cardenal John Henry Newman, recientemente ca nonizado, le era muy devoto. Misa: Hch 18, 1-8; Sal 97, 1bcde. 2-3ab. 3cd-4; Jn 16, 16-20 Después de la misión de Atenas, Pablo se va a Corinto, donde encuentra a Aquila y Priscila, esposos que habían sido expulsados de Roma por decreto del emperador Claudio. Pablo pasa el invierno allí y trabaja en el mismo oficio: “tejedores de lana para tiendas“. Los sábados acudía al culto de la sinagoga donde quería convencer a los asistentes de que Jesús era el Mesías. Los judíos se opusieron violentamente a su predicación y finalmente, Pablo, los dejó por imposibles y se fue a vivir a la casa de un pagano, Ticio Justo. Lo increíble fue la conversión de Crispo, “el jefe de la sinagoga“, con toda su familia. Otra “ecclesia domestica” se origina. También otros corintos se convierten a la fe. Acordémonos que más tarde Pablo escribirá dos cartas dirigidas a los de Corinto. Jesús en el Evangelio dice estas palabras:” Dentro de poco, ya no me veréis, pero dentro de otro poco me volveréis a ver“. ¿Cómo podían entenderlo? Este “dentro de poco” va entre el espacio temporal de su muerte, sepultura, y su Resurrección. También entre la inversión de la “alegría” y de la “tristeza“. La alegría del mundo se convertirá en tristeza, y la tristeza de los discípulos se convertirá en alegría Es la alegría de la Resurrección, desbordante y perenne. VIERNES Misa: Hch 18, 9-18; Sal 46, 2-3. 4-5. 6-7; Jn 16, 20-23ª La lectura de los Hechos atestigua un dato importante que hace concordar la historia de la Iglesia con la historia del Imperio. Exactamente se sabe por los anales de la historia profana que Galión fue procónsul de Acaya en el año 52. Pablo estaba entonces en Corinto, la gran ciudad helenística, donde había recibido una palabra del Señor: “Tengo un pueblo numeroso en esta ciudad“. Pasó allí el invierno, formando y consolidando la Iglesia, no sin dificultades, y luego, con los esposos Priscila y Aquila se embarcó para Siria. En la perícopa evangélica, el Señor anuncia que la tristeza de los apóstoles se convertirá en gozo. Será el gozo de la mañana de Pascua que desde Pentecostés es perenne en la Iglesia. Es la alegría de saber que Jesús está con el Padre y, por tanto, siempre con nosotros en el Espíritu de amor y de comunión. SÁBADO Misa: Hch 18, 23-28; Sal 46, 2-3. 8-9. 10; Jn 16, 23b-28 Pablo empieza el tercer viaje misionero cuya meta es llegar a Éfeso, la gran ciudad del Asia Menor. En esta ciudad encuentra una figura notable de cristiano, Apolo. Un creyente culto y fervoroso que se distingue en las disputas públicas con los judíos demostrando con la Escritura que Jesús es el Mesías. En el Evangelio, Jesús añade un motivo nuevo, algo que jamás habían oído sus discípulos: desde ahora todo será pedido al Padre “en nombre suyo“. Desde entonces, las oraciones litúrgicas que se dirigen al Padre concluirán siempre con el “per Christum, Dominum Nostrum“, ya que el Padre nada puede negar a los que le invocan en nombre de su Hijo. La oración litúrgica cristiana siempre y universalmente es “ad Patrem per Christum in Spiritui Sancto“, “al Padre por el Hijo en el Espíritu Santo”. Hoy y los dos días feriales subsiguientes, se canta el Salmo 67: “Se levanta Dios y se dispersan los enemigos“. Es un Salmo que Pablo cita en la carta a los Efesios para contemplar la Ascensión del Señor. Principalmente por el verso: “Ascendens in altum captivam duxit captivitatem” (Ef 4,8): subió a lo alto llevando cautivos y dio dones a los hombres. (Calendario-Directorio del Año Litúrgico 2022, p.270ss) |
DILLUNS Missa: Fets 16, 11-15; Sal 149, 1-2. 3-4. 5-6a i 9b; Jo 15, 26—16, 4a El relat dels Fets es va redactar en primera persona del plural “nosaltres” i ve a ser com un diari de la missió. Segurament és així perquè Lluc és ara el company de missió. Quan Pau trepitja la platja de Neàpolis, l’Evangeli arriba a Europa. Segons els exegetes això va poder succeir la primavera de l’any 50. El relat de l’encontre, conversió i Baptisme de Lídia, venedora de porpra, és bell i commovedor: la Bona Nova es transmet de cor a cor. Amb paraula confidencial, Jesús anuncia en l’Evangeli que l’Esperit donarà testimoni d’Ell, com també els seus deixebles. Tots dos testimonis aniran junts: ningú pot ser testimoni del Senyor si no té l’Esperit de Déu en el seu cor. DIMARTS Missa: Fets 16, 22-34; Sal 137, 1-2abc. 2d-3. 7c-8; Jo 16, 5-11 El bell relat, que escoltàvem ahir, de la conversió de Lídia i de la seva família contrasta amb el text d’avui. A Filips, Pau i Siles pateixen persecució: són despullats, assotats amb vares, apallissats de valent, duts “al fons de tot de la presó“, i immobilitzats amb grillons als peus. En aquestes condicions, s’esdevé com una mena de “teofania” en forma de “terratrèmol“. L’escarceller, enmig de la foscor, “demanà llum“: serà també la llum de la seva fe. Pau li diu clarament: “Creieu en Jesús el Senyor, tu i tota la teva família, i us salvareu“. A aquelles hores “de la nit” l’escarceller rep la instrucció catequètica. Després rep “immediatament el Baptisme“, juntament amb la seva família, “els para taula“, l’Eucaristia i celebren una festa per haver cregut en Déu. La fe és el motiu de la festa i de la joia. La seva nit es va il·luminar amb una nova llum, la del Senyor, com la nit pasqual. El text de l’Evangeli d’avui és complicat teològicament. L’”anar-se’n” de Jesús no ha de ser motiu de tristesa, sinó d’alegria. Perquè només anant-se’n pot enviar l’Esperit Sant. Per això els diu: “Us convé que me’n vagi“. L’Esperit revelarà al món la injustícia de la mort del Fill de Déu. DIMECRES Missa: Fets 17, 15. 22—18, 1; Sal 148, 1-2. 11-12. 13. 14; Jo 16, 12-15 Pau predica el cèlebre sermó a l’Areòpag d’Atenes: “Aquest Déu desconegut, que vosaltres ja venereu sense coneixe’l, és el que us vinc a anunciar“. I anuncia amb passió i intel·ligència, adaptant-se a la seva mentalitat i fins i tot citant un poeta pagà, el misteri del Déu viu, creador, en el qual “vivim, ens movem i som” i que els homes busquen, “com mirant d’apropar-s’hi a les palpentes per trobar-lo“. La Resurrecció de Jesús és la garantia de la veritat del que predica. Però quan van sentir dir la paraula “resurrecció” “van esclafir a riure“, com si fos una ocurrència. Va ser un fracàs clamorós. No obstant això, “Dionís l’Areopagita, una dona que es deia Dàmaris i uns quants més se li ajuntaren i es convertiren“. La llavor havia estat sembrada. És una cosa realment contemporània de tots els temps que l’Apòstol presenti el cristianisme com l’acompliment de la recerca del Déu viu (He 17,27). Jesús completa, en l’Evangeli, el seu ensenyament sobre l’Esperit Sant. Ells ara no poden dur o carregar en el seu pensament tot el que el Senyor diu, com tampoc podran carregar amb la Creu, però “l’Esperit de la veritat els guiarà cap al coneixement de la veritat sencera“. Aquesta no és d’ordre intel·lectual sinó existencial: la veritat plena és Déu en la glòria de la Trinitat. L’Esperit serà el pedagog i el mistagog de l’Església. DIJOUS SANT FELIP NERI, prevere Sant Felip Neri fou un “foll per Crist“. Originari de Florència, anà a viure a Roma. Visqué pobre entre els pobres, en barris marginals de la ciutat: de dia als hospitals i durant les nits a les catacumbes. Rebé l’efusió de l’Esperit Sant i es manifestà com apòstol, catequista i conseller d’ànimes. Anava sempre amb gent de tota condició, que el seguia en les seves iniciatives. Amb un grup de sacerdots fundà l’Oratori. S’ordenà de prevere essent ja gran i per obediència. Sempre es considerà l’últim de tots i el més indigne dels pecadors. La presència de l’Esperit Sant era en ell quasi “per rapte“. El carisma que visqué fortament fou l’alegria: una alegria expansiva, desconcertant i engrescadora. Amb aquesta alegria va morir. El metge, quan ja agonitzava al seu llit de mort, amb vuitanta anys d’edat, li digué: “Mai l’havia vist tant content com avui“, i ell respongué: “Quina alegria quan em van dir: Anem a la casa del Senyor“. A mitjanit, en una pobríssima cambra, i havent beneït els sacerdots que ell havia associat, descansà en el Senyor. És patró de Roma. La seva vida mereix ser estudiada. El sant cardenal John Henry Newman li era molt devot. Missa: Fets 18, 1-8; Sal 97, 1. 2-3ab. 3cd.-4; Jo 16, 16-20 Després de la missió d’Atenes, Pau se’n va a Corint, on troba Aquila i Priscil·la, esposos que havien estat expulsats de Roma per decret de l’emperador Claudi. Pau passa l’hivern allà i treballa en el mateix ofici: “fabricar tendes“. Els dissabtes anava al culte de la sinagoga on volia convèncer els assistents que Jesús era el Messies. Els jueus es van oposar violentament a la seva predicació i finalment, Pau, els va deixar per impossibles i se’n va anar a viure a la casa d’un pagà, Tici Just. Allò més increïble fou la conversió de Crisp, “el cap de la sinagoga“, amb tota la seva família. Una altra “ecclesia domèstica” s’origina. També altres corintis es converteixen a la fe. Recordem-nos que més tard Pau escriurà dues cartes adreçades als de Corint. Jesús, en l’Evangeli, diu aquestes paraules: “D’aquí a poc ja no em veureu, però poc després em tornareu a veure“. Com podien entendre-ho? Aquest “d’aquí a poc” va entre l’espai temporal de la seva mort, sepultura i la seva Resurrecció. També entre la inversió de l’”alegria” i de la “tristesa“. L’alegria del món es convertirà en tristesa, i la tristesa dels deixebles es convertirà en alegria. És l’alegria de la Resurrecció, desbordant i perenne. DIVENDRES Missa: Fets 18, 9-18; Sal 46, 2-3. 4-5. 6-7; Jo 16, 20-23a La lectura dels Fets testifica una dada important que fa concordar la història de l’Església amb la història de l’Imperi. Exactament, se sap pels annals de la història profana que Gal·lió va ser procònsol d’Acaia l’any 52. Pau estava llavors a Corint, la gran ciutat hel·lenística, on havia rebut una paraula del Senyor: “Jo tinc aquí a Corint molta gent destinada a ser el meu poble“. Va passar allà l’hivern, formant i consolidant l’Església, no sense dificultats, i després, amb els esposos Priscil.la i Aquila es va embarcar cap a Síria. En la perícopa evangèlica, el Senyor anuncia que la tristesa dels apòstols es convertirà en joia. Serà el goig del matí de Pasqua que des de la Pentecosta és perenne en l’Església. És l’alegria de saber que Jesús està amb el Pare i, per tant, sempre amb nosaltres en l’Esperit d’amor i de comunió. DISSABTE Missa: Fets 18, 23-28; Sal 46, 2-3. 8-9. 10; Jo 16, 23b-28 Pau comença el tercer viatge missioner la meta del qual és arribar a Efes, la gran ciutat de l’Àsia Menor. En aquesta ciutat troba una figura notable de cristià, Apol·ló. Un creient culte i fervorós que es distingeix en les disputes públiques amb els jueus demostrant amb l’Escriptura que Jesús és el Messies. En l’Evangeli, Jesús afegeix un motiu nou, quelcom que mai abans havien sentit els seus deixebles: des d’ara tot serà demanat al Pare “en el seu nom“. Des de llavors, les oracions litúrgiques que es dirigeixen al Pare conclouran sempre amb el “per Christum, Dominum Nostrum“, ja que el Pare no pot negar res als qui l’invoquen en nom del seu Fill. La pregària litúrgica cristiana sempre i universalment és “ad Patrem per Christum in Spiritui Sancto“, “Al Pare pel Fill en l’Esperit Sant“. Els dos dies ferials subsegüents, es canta el Salm 67, amb el verset “S’aixeca Déu: que es dispersin els enemics“. És un Salm que Pau cita a la carta als cristians d’Efes per contemplar l’Ascensió del Senyor. Principalment pel vers: “Ascendens in altum, captivam duxit captivitatem” (Ef 4,8): ” va pujar a les altures, s’endugué un seguici de captius, va repartir dons als homes“. (Calendari-Directori de l´Any Litúrgic 2022, p.264ss) |
